En Maturín, capital del estado Monagas, la gente ha hecho caso omiso a la llegada de la variante del covid-19, Ómicron, al país y siguen en las calles relajados, desafiando a la muerte.
Este jueves 23 de diciembre, el centro de la ciudad se mantuvo atestado de gente que salió a realizar sus compras por la Navidad, dejando de un lado, un importante número de personas, las medidas de bioseguridad.
En las unidades de transporte público, locales y abastos, se pueden ver las personas sin el tapabocas o protector facial, y sin respetar las distancia.
El anuncio que hizo el Presidente Maduro, de los primeros 7 casos de ómicron, al parecer, no fue tomado en serio y la falta de consciencia quedó en evidencia.
Cabe destacar que Monagas, y por ende su capital, ha sido una de las regiones con mayor número de contagios en los últimos días, según los reportes oficiales.
Sin embargo, muchos ciudadanos temen que el virus chino se siga propagando y provocando la muerte de muchos pacientes.