La crisis del diésel en nuestro país es completamente distinta a la que se produce en el mundo entero por el uso de este componente, realmente existe una polémica bastante grande y tiene que ver con una situación de salud y de cuido del medio ambiente, pero en Venezuela la situación esta unidad a un derecho fundamental , como lo es el de la alimentación, para muestra solo un botón , la Alianza por la Seguridad Agroalimentaria de Venezuela advirtió que por el incremento en la escasez de gasoil, se han perdido cerca de 80 mil toneladas mensuales en los últimos dos meses.
“Hasta el año pasado se perdieron 25 mil toneladas mensuales de alimentos, pero durante los últimos dos meses, ante el incremento de la escasez de diésel, se han perdido cerca de 80 mil toneladas mensuales en los últimos dos meses”, advirtió el presidente de la organización, Juan Carlos Montesinos.
Dijo Montesinos que “la escasez de combustible está afectando a los transportes de carga pesada que se usan para trasladar alimentos. Esto ha generado que muchos rubros se pierdan en las unidades de producción”. Según el presidente de la alianza, aproximadamente, el 75% de los transportes de carga de alimentos funcionan con diésel.
“El periodo de invierno lo tenemos encima (…) se necesitan, por lo menos para tres meses, alrededor de 2 millones 300 mil barriles de gasoil para solventar el problema de la producción primaria solamente”, resaltó.
Según indica Montesinos, cerca de 15 mil tractores se mantienen paralizados de un total de 25 mil en todo el país, lo que podría afectar la producción de maíz y arroz. Señaló que a semanas del periodo de invierno, cuando se estimaba sembrar unas 700 mil hectáreas de maíz blanco, de no normalizarse el suministro
Afectación general
En los estados Táchira, Mérida y Trujillo la escasez está afectando la producción de hortalizas. En esta entidad el litro de gasoil se vende a 1 dólar el litro en el mercado negro. “A esos precios no da la rentabilidad, ya estamos viendo el incremento de casi un 60% en las ferias de verduras”, sostuvo Montesinos.
Ante el incremento en el costo del combustible y la poca oferta que habrá de los alimentos, consideró que será inevitable el aumento de los precios, sobre todo, en los rubros provenientes de la región andina como las hortalizas, frutas, tubérculos y verduras.
Explicó que, dependiendo el tipo tractor, una máquina consume 300 litros de gasoil en un día, por lo que las cantidades de combustible que se requieren son altas.
Los alimentos de origen animal también se ven afectados por la situación del transporte. Tal es el caso de en zonas como El Palmar, al sur de Bolívar, en el que la producción de leche ha caído ante la escasez de gasoil para encender las plantas que garantizan su refrigeración, y las limitantes para trasladarla a los sitios de venta. Por esto han utilizado la mayoría de la leche para producir queso, estima que cerca de 3 millones de litros de leche se están perdiendo o usando para producir queso a diario.
El presidente de la asociación contó que anteriormente los productores realizaban proezas para lograr trasladar la leche, como llevarla en moto hasta ciertos puntos donde los camiones a gasoil la recibían y la acercaban a las agroindustrias. “Ahora ni eso se puede”.
“No hay receptoría de leche en la agroindustria. No hay canales de distribución y son rubros perecederos, y con las deficiencias de electricidad que hay en gran parte del país, estas agroindustrias que funcionan con plantas eléctricas de diésel, no se pueden arriesgar a perder la leche”, dijo.
La polémica mundial sobre el diésel
En toda Europa existe un debate bastante profundo sobre el tema del uso del diésel, en América países como Chile han pensado que si realmente quieren consolidar la revolución energética deben disminuir el uso del diésel en vehículos debido a sus efectos sobre el cambio climático, su impacto en la salud de las personas , discuten sobre su reemplazo por el uso de fuentes alternativas, renovables y limpias.
En Europa se discute aumentar las restricciones para los vehículos que utilizan diésel debido a la cantidad de emisiones tóxicas que producen, en Chile, su precio en la práctica está subsidiado, su consumo aumenta cada año y no existe un plan dirigido a reemplazar este combustible derivado del petróleo por opciones más baratas y menos contaminantes.
Hay sin duda un negro futuro del diésel . En París, no se puede circular con coches diésel a partir de 2020 y, desde el pasado 1 de julio, ya no se puede circular por esta ciudad entre las ocho de la mañana y las ocho de la tarde . En muchas ciudades alemanas, tampoco puedes entrar ya al centro si conduces un coche de gasóleo
Noruega ha ido mucho más allá, a pesar de ser el principal productor de petróleo de Europa, se han empezado a plantear prohibir los coches diésel y gasolina a partir del año 2025