En lo que va de año, trabajadores informales de la calle Monagas en pleno centro de la ciudad, reportan una caída en las ventas de un 90%. Afirman que esto se debe al bajo poder adquisitivo de la mayoría de los venezolanos y solo en días especiales como el de las madres y el padre, «estuvieron un poquito mejor».
A pesar de esta situación, propietarios de puestos que por muchos años se han dedicado a esta actividad, señalan que con lo poco que se hace, pagan a sus empleados. Asimismo, ahora viajan menos a Caracas a comprar mercancía.
“Antes uno iba a la capital una vez por semana a comprar mercancía, pero ahora es una vez al mes o con suerte cada 15 días. Algo que queremos en reunirnos con la alcaldesa Ana Fuentes y el gobernador Ernesto Luna para hablar del tema de la reubicación, estamos conscientes de que hay muchos buhoneros y se deben despejar las vías”, expresó Núñez.
De igual forma, recordó que había un espacio ubicado en el Paseo Bolívar frente a la escuela Vicente Salias donde hay 50 puestos, pero aseguró que no se vendía nada por ser un sitio poco transitado. Asimismo, el lugar se presta para la inseguridad por la misma razón.
Actualmente hay alrededor de 350 buhoneros entre la referida calle y el bulevar Arriojas, por lo que reiteró el llamado para que sean reubicados al edificio diagonal a la Gobernación.