La falta de agua y la distribución de gas doméstico son los principales problemas que padecen vecinos de las calles Barreto y Urica de la parroquia San Simón. A un lado de la vía se puede apreciar a habitantes llenando sus recipientes para hacer sus quehaceres del hogar.
Desde hace cinco meses los residentes de esta zona no cuentan con suministro de agua y denuncian que en todo este tiempo solo dos veces han enviado camiones cisternas. De resto, deben cargar botellones y otros recipientes en carruchas, coches o carritos de mercado.
“En algunas casas llega el agua con muy baja presión, pero en 95% de las viviendas no sale ni aire. La mayoría de los habitantes somos personas de la tercera edad que debemos salir a cargar agua, esto a muchos nos ha causado enfermedades con dolores de espalda y la columna”, expresó Crisanto Bello quien es docente jubilado.
Por su parte, Carlos Alberto Morán otro de los vecinos afectados manifestó que el problema con el recurso hídrico data desde el primer periodo de la exgobernadora Yelitze Santaella. Denunció que se han cambiado y reparado bombas en la planta potabilizadora del Bajo Guarapiche, sin embargo la carencia del suministro se ha agudizado.
Entre tanto, con el la falla en la distribución del gas doméstico, expresaron que en lo que va de año, apenas dos veces han vendido las bombonas. No obstante, recientemente vendieron los cilindros, pero solo despacharon los pequeños y medianos, quienes tienen de 42 kilos aún están a la espera de que las entreguen.