El papa Francisco exaltó a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá con una rosa de oro, un significativo obsequio que otorgan los pontífices a las advocaciones marianas de larga historia.
Fue justo al inicio de la eucaristía donde se presentó el ramo dorado que fue enviado desde el Vaticano por medio del sustituto para asuntos generales de la Secretaría de Estado del Vaticano, Monseñor Edgar Peña Parra, quien preside la misa.
Entre aplausos la feligresía agradeció el gesto del Santo Padre. La rosa de oro fue situada en los pies de la Reina Morena, tal y como pidió Francisco.
En la ceremonia se explicó que es una flor que no se marchita y que representa a todos los devotos.
Esta condecoración se da por los 80 años de coronación canónica de la Dama de El Saladillo.
También se le concedieron dos anillos que serán entregados a dos zulianos insignes, el Monseñor Edgar Peña y Monseñor Helizandro Terán, Arzobispo coadjutor de la Arquidiócesis de Mérida, quien consagrará el pueblo zuliano a la Virgen en sus 313 años de renovación y 80 de patronazgo.
La pieza de oro luce como un pequeño y lujoso árbol. Desde la base desprenden una serie de ramas de donde nacen sublimes hojas y rosas.