Una fuente policial que investiga el asesinato del médico Silvino Antonio Valladares (28) reveló que la víctima conocía a su agresor y que, presuntamente, ambos compartieron antes de que ocurriera el crimen.
El hecho se registró en el interior del ambulatorio Negro Primero, ubicado en el bloque 2 de Lomas de Urdaneta, Caracas.
En el baño del módulo había ropa y estaba el arma blanca que le causó la muerte al médico.
El profesional de la salud vivía con su esposa e hija de tres años en la parte superior del recinto, y la semana de su muerte, la joven, quien también es médica, se encontraba en Barquisimeto con la niña.
Entre la tarde y noche del jueves 10 de agosto, la mujer se extrañó de que Valladares no se comunicó con ella ni contestaba el teléfono. Por tal razón, que llamó a una enfermera que laboraba en el lugar y también a la delegada del Comité de Salud del consejo comunal.
Como era tarde y vieron el lugar cerrado, regresaron al día siguiente. Esa mañana hallaron el cadáver ensangrentado.
La fuente policial desmintió la versión de que lo asesinaron por la supuesta falta de insumos en el ambulatorio y aseguró que la especulación “salió de las redes sociales”.
Indicó que, en los próximos días, el director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), comisario Douglas Rico, ofrecerá mayores detalles.
Habitantes de la zona sospechan que el responsable del asesinato es alguna persona en situación de calle, de las que deambulan por escaleras que comunican los bloques 1 y 2 con el 10.
“Esta invasión comenzó con un par de ranchitos y ahora hay muchos más, estas personas se esconden en la maleza que está junto a las escaleras y allí consumen drogas”, describió un habitante de la zona.
Con información de El Pitazo.