Atado de pies y manos y con cinco perforaciones por impactos de bala en la cabeza, la Brigada de Homicidios de la Policía de Chile halló el cuerpo sin vida de un migrante venezolano de 21 años.
El suceso ocurrió en la Ruta G-60 sector Chocalán, informaron medios locales.
La víctima para el momento no portaba documentos. Fue necesario hacer una serie de diligencias y análisis para dar con su identidad, entre ellos los tatuajes que tenía.
Fue así como lograron conocer que se trataba de un ciudadano de nacionalidad venezolana.
En lugar se colectaron otros 13 casquillos de bala. Las evidencias fueron levantadas y remitidas al Laboratorio de Criminalística para ser procesados.
La investigación del caso fue derivada a la Fiscalía de Alta Complejidad y las diligencias quedaron a cargo de la Brigada de Homicidios.