Desde hace algunos meses los pacientes, familiares y personal de salud del hospital Universitario Dr. Manuel Núñez Tovar de Maturín, han denunciado las malas condiciones de algunos servicios médicos, asi como reconocen mejorías notables en otros; situación que se debe mayormente al apoyo que han dado los pacientes, los médicos y enfermeras que aportan cada uno “su granito de arena”, para lograr que cada espacio esté en óptimas condiciones.
Los servicios de Ginecología y Obstetricia, Traumatología y Ortopedia, Cirugía General y hasta en el área de emergencia, los pacientes aseguran que deben llevar todos los insumos, porque los médicos, aunque hacen el trabajo requerido, que es atender y medicar a los enfermos, deben trabajar con lo que hay. Por lo que siempre deben comprar de todo.
Ernesto Villarroel, quien llevó a su esposa para realizarle un tratamiento médico en Sala de Parto del hospital central, contó entre lágrimas todo lo que ha tenido que vivir.
“Los médicos del hospital de Maturín definitivamente trabajan por amor y vocación de servicio, porque no tienen las condiciones para atender a un paciente como es requerido.
Cuenta que a su esposa durante la realización del tratamiento le pidieron todos los insumos para poder atenderla, además de los exámenes médicos, y que ha gastado en todo eso más de 150 dólares y todavía no le había recetado los medicamentos para la recuperación. “Aquí vivimos un verdadero calvario”, indicó.
Aunque a través de las redes sociales las autoridades de salud del estado, han indicado que durante el año 2024 la cantidad de “medicamentos y materiales médicos quirúrgicos”, que son llevados al HUMNT. Miriam Delgado se pregunta ¿A dónde van a parar lo que traen al hospital?,
“No es justo que supuestamente traigan y traigan insumos al hospital y todo se desaparezca, muchas veces nosotros tenemos que sacar dinero de donde no tenemos para poder comprar los insumos para cumplir el tratamiento.
A Dios doy gracias que los médicos todavía aquí tienen corazón y ayuda a las personas que no tienen, pero aquí vivimos las de Caín”.
Esta familia asegura que ha gastado al menos 80 dólares en exámenes médicos especializados, mientras que diariamente se realiza la hematología en 3 dólares, un ecosonograma pélvico 20 dólares, además de gastos en comida y materiales de limpieza para hacer la habitación donde se queda recluida, mientras mejora su salud.
Los pacientes, personal de salud y también los familiares piden a las autoridades más control y supervisión a la hora de hacer las entregas de medicamentos y materiales médicos quirúrgicos al principal centro de salud de la región.