Cargados de entusiasmo y de esperanza por romper las cadenas del olvido en materia de servicios públicos, vecinos del sector Viento Colao, parroquia San Simón de Maturín, recibieron este martes 21 de septiembre el mensaje de los candidatos de la Unidad Democrática, Ángel Aristimuño ‘Perikle’, a la municipalidad, y Piero Maroun, a la Gobernación; para plantearles los graves problemas que viven a diario.
Desde las 3:00 de la tarde los habitantes de la comunidad ubicada en pleno centro de la capital monaguense esperaban sentados al frente de sus casas, en puertas y ventanas para conocer a los candidatos, apostando en ellos las soluciones no solo de esta comunidad, sino también de toda Maturín y Monagas.
«No somos como otros que vienen por una foto y se van. Nosotros hemos venido para escuchar de cerca los planteamientos de la comunidad de Viento Colao y así priorizar nuestra agenda de gobierno y garantizarles una mejor calidad de vida con verdaderas políticas públicas y no con pañitos de agua tibia», expresó.
En el recorrido casa por casa, ‘Perikle’ comentó «nos encontramos con el grave problema de alumbrado público, los vecinos temen salir de noche por la alta incidencia delictiva producto de la oscuridad en la que quedan después de las 6 de la tarde. Todas las calles de la comunidad están en total tinieblas porque los postes quedaron de adornos. Además de vivir como callemos por la falta de agua».
Aseveró que «con un estado descentralizado los gobernadores y alcaldes del país pueden manejar sus recursos y cambiar la realidad de los sectores y no esperar que desde Miraflores se mueva un dedo para que llegue luz, agua o asfaltado en las comunidades».
«Esa es nuestra lucha y con la nueva Maturín vamos acabar con la oscuridad de la ciudad, porque más del 70% de los sectores están en la misma situación de vulnerabilidad. Escuchamos y proponemos la alternativa de cambio para transformar la realidad que vivimos este próximo 21 de noviembre», añadió.
Nelson Chaló, habitante de la zona, comentó que «salir de noche es exponerse mucho el sitio queda como una boca de lobo y los delincuentes aprovechan para hacer de las suyas. En lo que va de semana han robado a ocho vecinos».
«La comunidad está cansada de vivir con esta incertidumbre porque hasta en nuestras casas no estamos seguros, cuando roban nadie lograr saber quién es por la oscurana que arropa al sector», agregó.
Esperan que Dios les mande agua
Viento Colao actualmente cuenta con más de 700 familias y es uno de los 200 sectores de Maturín que también carece del servicio de agua potable, residentes esperan que Dios les mande la lluvia para poder realizar los quehaceres del hogar.
«La señora Santaella prometió unas cuantas bombas para esta comunidad pero se fue con la cabuya en la pata y nos dejó viendo para los lados», comentó la señora Tibisay Rivas.
Agregó la vecina que a las 3:00 de la madrugada caminan hasta la zona baja del sector para agarrar un botellón de agua para cocinas y tomar, del resto dependen de la lluvia.
«Más de cuatro años sin recibir agua por tubería y no todos cuentan con los recursos para comprar un cisterna. Muchos creen que porque vivimos en el centro somos personas ricas y por eso nos marginan», añadió Rivas.
Ante esta dificultad, el abanderado por la Unidad a la Alcaldía de Maturín puntualizó que junto a Piero Maroun crearan estrategias para garantizar el suministro de agua, como un derecho humano a los pobladores de Maturín a través de estrategias claras y con personal capacitado en la materia.