Acaba de finalizar la Semana Santa, sin embargo, durante el año existen cirineos actuales que ayudan a cargar las cruces pesadas de muchos ciudadanos, uno de ellos es Jesús Silva, fundador del proyecto Arepazo Maturín.
Lo que nació como una ayuda social de un joven de 18 años para esa fecha, hoy en día después de cuatro años es una marca establecida y consolidada como una Organización No Gubernamental (ONG) que brinda protección, ayuda y bienestar a las comunidades más necesitadas y de forma directa a los niños.
En el 2017, la situación política del país obligó a que en muchos estados se registraron protestas de ciudadanos, en una de ellas participó Jesús. “Cuando iba caminando desde la avenida Raúl Leoni hasta la avenida Libertador, vi como muchas personas estaban comiendo de la basura y eso me impactó mucho, al llegar a casa le comenté la idea a mis padres de hacer una actividad a favor de esas personas y me apoyaron sin pensarlo”, comenta.
El también estudiante de medicina asegura que Arepazo Maturín, no solo se dedica a repartir comidas en los sectores de la ciudad, sino que actualmente se encuentran atendiendo directamente dos comunidades a las cuales les brindan todas las herramientas necesarias en alimentación, nutrición, educación y capacitación para desarrollar algún emprendimiento.
“La idea es educar a la comunidad en relación a ser comunidades sostenibles y hacia allá vamos, cuando iniciamos muchas personas nos ayudaron y lo siguen haciendo, pero por colocar un ejemplo, ahora cuando hacemos las arepas en vez de pedir la harina, la misma comunidad nos otorga el maíz y con ello elaboramos el alimento; eso es lo que buscamos, que la comunidad no dependan que otros lleven sino que puedan producir en beneficio de ellos mismos”, afirmó.
Silva destacó que, Arepazo Maturín, busca y contribuye con el cumplimiento de los objetivos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Unicef como lo son hambre cero, Alianzas institucionales y comunidades sustentables; por lo cual se mantienen realizando constantes seguimientos en los sectores donde actualmente se encuentran trabajando.
En la actualidad, la ONG está conformada por aproximadamente 35 jóvenes voluntarios, todos estudiantes de diversas universidades de la ciudad, quienes reciben capacitación e inducción en diferentes áreas del trabajo social.
Jesús, quien además es líder social en emprendimiento, resaltó que, con Arepazo Maturín, buscan ser referencia no solo como marca, sino a nivel social y comercial por lo que apuntan al desarrollo sostenible mediante la formación a emprendedores.
Asimismo, Silva, dejó muy en claro que con Arepazo, no buscan crear un nombre que los lleven a una posición política, “para nada, no somos políticos y tampoco vamos a convertir la ONG en un partido político, Arepazo es un proyecto de acción social dirigido a mejorar la calidad de vida de las comunidades más vulnerables”.
“Hay quienes creen que el trabajo social es fácil, pero cuando se vive la realidad que viven los que habitan en esos sectores la mentalidad cambia, la forma de pensar y actuar se torna distinta, nos hemos encontrado con casos que son realmente delicados pero gracias a las alianzas que hemos creado hemos podido revertir la situación y eso es lo que nos satisface”, manifestó el joven.
El director de Arepazo Maturín fue enfático al manifestar “se trata que las familias que habitan las comunidades se comprometan en aplicar y cumplir con las indicaciones porque sino el trabajo es en vano”.
Invitó a la población a sumarse al proyecto, a tender la mano a las organizaciones que se encuentran realizando labor social en comunidades de escasos recursos. Destacó que las puertas de Arepazo Maturín estarán siempre abiertas a cualquier iniciativa o donación que deseen realizar a favor el proyecto que vienen desarrollando.