La Semana Santa es un período sagrado del cristianismo que transcurre desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección, fechas en las cuales se realizan distintas actividades y costumbres.
Los habitantes de las comunidades disponen su tiempo para participar de las actividades recreativas y religiosas que organizan los entes gubernamentales y las autoridades religiosas, por lo que es común observar alta afluencia de temporadistas en balnearios y templos
Muchas son las tradiciones y creencias que se tienen en estas fechas, entre las más conocidas y cumplidas es la de no comer carne roja el jueves y el viernes santo, debido a que simboliza el cuerpo de Cristo, por lo que se suprime el consumo de este alimento por el de carne blanca de pescado y se elabora el tradicional cuajao.
La devoción a la imagen del Nazareno de San Pablo en Caracas, es otra de las manifestaciones populares. Costumbre que dio inicio cuando por epidemia de gripe a la que no se le encontraba cura. A lo largo del territorio venezolano, el Miércoles Santo la procesión de la imagen de Cristo cargando la cruz, es la de mayor veneración, en el oriente, las imágenes del Nazareno de Catuaro en el estado Sucre y en Caripito en el estado Monagas, son las que más asistencia reúnen
La Quema de Judas es otra de las tradiciones más emblemáticas de estas fechas, se efectúa el domingo de resurrección. La principal razón es recordar la traición de Judas a Cristo. Se hace un muñeco de trapo a tamaño real y es rellenado con material que prenda en fuego y, generalmente, todo es colaboración de la comunidad, generalmente representa a un político que ha defraudado a la población.
Durante el Viernes Santo está la visita a los siete templos mientras que el Sábado Santo ocurre la bendición del fuego y agua.
A nivel recreativo está la realización de los festivales playeros y en balnearios, la elaboración se sopas y sancohcos y las competencias de juegos tradicionales propios de la época como trompo y papagallos.
No se puede dejar por fuera la amplia gastronomía propia de la fecha tanto dulce como salado. El rey sin duda alguna es el cuajo, un pastel a base de huevos montados, papas y pescado, aunque según los gustos de las personas este puede variar a morrocoy, baba (especie de un caimán) o frutos del mar.
El dulce de lechoza, las pepas de mango, jalea, los turrones de coco y el dulce de leche, forman parte de los platillos que pueden ser degustados durante la llamada Semana Mayor.