“Sabemos que el Hospital Universitario Dr. Manuel Núñez Tovar (Humnt), es el principal centro de salud del estado, pero los demás también ameritan que se le meta la mano para que sigan brindando bienestar a los habitantes de la ciudad”, aseguró un estudiante de medicina que está realizando sus pasantías en el Hospital José Antonio Serres de Las Cocuizas.
Aunque no es la primera vez que ocurre, trabajadores de la salud del mencionado nosocomio capitalino, denunciaron que el centro asistencial se encuentra en condiciones deplorables, por lo que brindar un buen servicio a los pacientes se ha convertido en una situación cuesta arriba.
Aseguran que el sistema de climatización dejó de funcionar hace tiempo y por ende no se están realizando hospitalizaciones, muchas de las camas no cuentan con colchón, las salas sanitarias esta colapsadas y han sido utilizadas como depósitos de equipos que ya cumplieron su ciclo de vida o que por algún desperfecto dejó de utilizarse.
Los tableros eléctricos no resguardan el cableado, lo que se ha convertido en un problema palpable tanto para el personal como para quienes requieren atenderse algún tipo de emergencia. El techo se cae a pedazos y el agua de lluvia inunda algunas áreas del recinto cuando sobre Maturín el clima hace de las suyas.
Existen áreas internas que están a oscuras debido a que las lámparas están quemadas y las sillas que eran utilizadas en zonas comunes para esperar, están dañadas.
Destacan que si algo existe en el mencionado recinto de salud es las ganas y el esfuerzo de trabajar de los médicos para atender a los pacientes, sin embargo, las condiciones no se prestan ni cuentan con los insumos necesarios.
Resaltaron también que el hospital tiene una morbilidad de 300 personas por día, por lo que se atiende un número considerable de emergencias a pesar que en las instalaciones porque no están los equipos necesarios.
Asimismo, se pudo conocer que el hospital no posee con una ambulancia propia para realizar los traslados necesarios y que, los quirófanos se encuentran inhabilitados, retrasando de esta forma el plan quirúrgico nacional.
Los trabajadores solicitan al gobernador del estado Monagas, Ernesto Luna, y a la autoridad única de salud, Dra. Yerika Arzolay, realizar una inspección al recinto y así buscar las soluciones pertinentes a la situación antes que de forma espontánea, se decrete un cierre técnico del lugar.