Luego que la ministra de Interior y Justicia, Carmen Meléndez, anunciará que a partir de mañana domingo 1 de noviembre se reabrirían las iglesias en Venezuela, el obispo de la ciudad de San Cristóbal, monseñor Mario Moronta, se pronunció para aclarar que “es el episcopado quien decide cuándo se abren los templos, es decir la iglesia, para que no exista confusión”.
En efecto, refutó la decisión del Estado venezolano y aseguró que las instituciones religiosas permanecerán cerradas. Puntualizó que la reapertura de dichas edificaciones se darán no por puro sacramentalismo ni espiritualismo, sino porque se están dadas las condiciones.
Durante la reunión que sostuvo el jueves la comisión permanente de la Conferencia Episcopal Venezolana, el padre Moronta recordó que, realmente, las Iglesias no han estado cerradas ya que “han permanecido abiertas mediante los medios de comunicación”.
Agregó que al momento de abrirse los santuarios del país, habrá normas muy estrictas, que “no son medidas del gobierno ni de la iglesia, sino de la sabiduría de los médicos”.
Por su parte, el también obispo de San Felipe y administrador apostólico de la Arquidiócesis de Barquisimeto, monseñor Víctor Hugo Basabe, reiteró que “será la iglesia la que decidirá cuándo y de qué manera se reabrirán los templos y las demás actividades eclesiales”.
Sobre el anuncio de la ministra Carmen Meléndez de la reapertura de las iglesias, la funcionaria detalló que durante las reuniones religiosas, los fieles devotos podrían ocupar sólo 40% del templo y tomando todas las medidas de distanciamiento social.
Acotó que será obligatorio el uso de tapabocas y la toma de temperatura de los feligreses a su ingreso a los templos.