El esplendor de la ciudad distinta, catalogada así por los maturineses cuando en décadas pasadas sus plazas, calles y avenidas lucían impecables y cuidadas, atrajo a muchos que vieron en ella un sitio tranquilo para vivir y desarrollarse.Maturín, capital del estado Monagas, llegó en un tiempo no muy lejano a ser comparada con el boulevard de California de Estados Unidos, por su pulmón vegetal en la avenida Bolívar en pleno centro de la ciudad; inmensos árboles adornaban los diferentes espacios de recreación y esparcimiento. MIRA TAMBIÉN Santaella sustituye tendido eléctrico averiado por lluvias en El Ambiente MIRA TAMBIÉN Santaella sustituye tendido eléctrico averiado por lluvias en El Ambiente Ante este escenario, un estudio reciente de la Universidad de Oriente (UDO) Monagas revela que el atractivo de la ciudad decayó por múltiples factores biológicos, ambientales y por la mano del hombre, esta última con gran fuerza y ha devastado parte de los árboles de los cuales de desconocen su edad y vital útil.La tesis presentada por la profesora y PhD María Claudia Sánchez, titulada Evaluación Fitosanitaria de los árboles de la plaza Bolívar de Maturín, demuestra los agentes de daño, entre ellos: el abiótico de intensidad baja en 100 porciento de los árboles generado por estrés hídrico y deficiencia de nutrimentos, seguido de las afectaciones por el hombre cuya intensidad es