Un niño de 11 años desafió a la muerte la mañana de este sábado al lanzarse de un autobús, cayendo sobre un motorizado que por fortuna se desplazaba a velocidad reducida.
Testigos comentaron que el niño, proveniente de Punceres, no esperó que la unidad colectiva llegara hasta la próxima parada en la plaza Ayucucho, sino que decidió tirarse del carro en marcha a la altura del cruce de la calle Monagas.
Lo hizo en el carril cerca de la isla, por lo que el motorizado logró maniobrar su vehículo y detenerse unos metros más adelante.
«Quedó en el tablero de control. Le dije, asustado, aguántate», relató el motorizado.
En cuando al pequeño, según, andaba en las unidad colectivas pidiendo dinero y en efecto para el momento del suceso mantenía empuñado un dinero en efectivo.
Funcionarios de Polimaturín que se encontraban cerca del sitio se apersonaron para conocer qué estaba pasando, realizando los trámites correspondientes.
El niño solo sufrió leves aporreos.