Un hombre identificado con el nombre de Eugenio Obispo Arteaga (70), falleció luego que dos hombres encapuchados le propinaran tres impactos de bala la mañana de este 14 de marzo.
La dantesca escena ocurrió en la calle principal de Parapal, en el municipio Francisco Linares Alcántara del estado Aragua; donde la victima armaba un puesto improvisado para vender chicharrones, mantecas y otros derivados de la carne de cochino.
Obispo, quien vivía en el barrio Francisco de Miranda, era apodado como el “Lechero”, además de ser muy conocido por su carisma y bromista con los demás comerciantes que hacen vida en esa arteria vial.
Según fuentes policiales las 10:45 a.m., dos sujetos a bordo de una motocicleta y con la cara cubierta, abordaron a Obispo de manera repentina, y sostuvieron un cruce de palabras, sin embargo, a las 10:47 a.m se escucharon tres detonaciones de arma de fuego y posteriormente los encapuchados huyeron del sitio.
El septuagenario murió producto de las heridas mortales, de las cuales dos balas impactaron en la región del tórax y la otra en el flanco izquierdo del abdomen.
Al lugar acudieron funcionarios de la Policía Municipal de Francisco Linares Alcántara, Policía Bolivariana de Aragua (PBA), y Policía Nacional Bolivariana (PNB), quienes al llegar al lugar apartaron a la multitud que veían el cadáver tirado en el suelo.
En torno a este suceso giran dos hipótesis, la primera que se trata de una venganza debido a que Obispo, al parecer, es padre de un funcionario policial y la segunda es que presuntamente esos individuos discutieron con el chicharronero, ya que éste les debía un dinero que le habían prestado.
Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), realizaron las pesquisas sobre este homicidio y procedieron a realizar el levantamiento del cadáver.