Luego que este domingo 22 se celebrara el día de Santa Rita de Casia, patrona de las cosas imposibles, la reliquia de primer grado que se venera en la iglesia San Simón de Maturín, realizará una peregrinación por diferentes parroquias de la Diócesis de Maturín.
Así lo dio a conocer el administrador apostólico del templo donde se custodia el fragmento de la santa, Pbro. Miguel Febres, mientras ofrecía la homilía en la misa dominical, destacando que la ruta a seguir será en el año 2023 y desde ya un grupo de feligreses se encuentra en la planeación de la misma y de toda la logística que permita cumplir con lo planteado.
“Lo estamos organizando si Dios lo permite, para el año que viene, dando chance así a que la pandemia haya desaparecido un poco mas y podamos realizar actividades con mas normalidad”, aseguró el sacerdote.
La reliquia de Santa Rita de Casia, se encuentra en la parroquia San Simón, desde el año 1979, estaba expuesta en un una base de madera, sin embargo, hace varios años sufrió un accidente luego que fieles encendieran velas cerca de ella e hiciera que se quemara, posteriormente, tras un proceso de restauración, la partícula se encuentra resguardada en una nueva custodia.
Este domingo, tas culminar la eucaristía en honor a la Santa, la imagen junto a la reliquia, salieron en procesión alrededor de la plaza Bolívar de la capital monaguense. La Iniciativa de la peregrinación por la Diócesis de Maturín obedece a la propuesta de un grupo d fieles devotos quienes manifestaron que existen muchas personas devotas de la Santa y es una oportunidad precisa para que estén cerca y puedan contemplar la reliquia.
Se trata de un fragmento óseo del fémur de la santa, el documento de autentificación firmado y sellado por Fray Egidio Galeo, postulador general de la causa así lo valida.
Es un relicario de palta en forma circular, adornado en tela de seda color rojo, blindado con el sello de la causa. Al tratarse de un pedazo de hueso de la santa se convierte en una reliquia de primer grado.
Su nombre original era Margherita Lotti, que traducido al español es Margarita, sin embargo con la tradición popular solo quedó con las últimas dos silabas de su nombre, Nacida el 22 de mayo de 1457 en Cascia, Italia; muriendo el mismo día de su nacimiento pero 76 años mas tarde.
Casada de forma obligada por sus padres. Su esposo la maltrataba constantemente, y al cual le procreó dos hijos. Por el carácter temperamental de su esposo, se veía envuelto en problemas lo cual lo llevaron a ser asesinados. Sus hijos crecieron con la venganza como objetivo, sin embargo Rita aseguró que los prefería muertos ants que vivieran con el sentimiento de la ira y la venganza.
Una vez viuda, Rita, pidió la admisión al monasterio de las agustinas de Santa María Magdalena, en Cascia pero no fue aceptada debido a que sólo se permitían vírgenes. Un año más tarde también murieron sus dos hijos. Fallecieron ambos al mismo tiempo, de muerte natural. Rita los había preparado plenamente para encontrarse con Cristo. Con un amor heroico por sus almas, le había suplicado que ambos adolescentes murieran, porque temía que estuvieran planeando vengar el asesinato de su padre. Habrían cometido así el pecado de la venganza, lo que hubiera condenado sus almas eternamente. Ambos se enfermaron y murieron, también pidiendo perdón a su madre por todos los dolores que le habían causado.
Ya sin obligaciones familiares, Rita fue aceptada en el convento, recibió los hábitos de monja, y más tarde realizó su profesión de fe. Tenía 36 años. En el convento, Rita se entregó a una vida de oración y penitencia.
De acuerdo a la tradición en 1428, una madrugada Rita recibió de manos de Cristo una larga astilla de madera clavada en el hueso de la frente. Se trataba de un estigma divino: la marca de la corona de espinas que Jesucristo había exhibido en la cruz. Le extrajeron la astilla y la guardaron como reliquia sagrada. Cada madrugada el estigma se le volvía a abrir por sí mismo, hasta que empezó a expeler un fuerte olor inmundo, que se mantuvo milagrosamente el resto de su vida.
En 1453 Rita cayó en cama gravemente enferma. Desde ese momento, estando siempre atendida por novicias, la herida de su frente gradualmente se cerró, pero Rita pasó los últimos cuatro años de su vida con infecciones en la sangre.
Uno de los símbolos de Santa Rita es la rosa. En su vejez, ella contaba que su marido le prohibía dar de comer a los pobres. Un día en que estaba saliendo de su casa con un pan bajo sus ropas, Mancini (su esposo) la confrontó y le quitó el vestido: pero el pan se había convertido milagrosamente en rosas. Esta historia también se cuenta que le sucedió a Santa Isabel de Portugal y a san Diego de Alcalá.
Al final de su vida, la visitó su prima de su aldea de Rocca Porena. Le preguntó si quería algo y Rita le pidió que le llevara una rosa del jardín del convento. En pleno invierno, la prima creyó que no encontraría nada, pero cuál no sería su sorpresa al encontrar un pimpollo de rosa. Se lo llevó a Rita. Esa rosa representaría el amor de Cristo hacia Rita, y la capacidad de Rita de interceder por las causas imposibles.
Generalmente se la pinta sosteniendo rosas, o con rosas apoyadas en el piso a sus pies. El día de su fiesta, el 22 de mayo, las iglesias de Santa Rita o las regentadas por la Orden de San Agustín y la Orden de Agustinos Recoletos, en todo el mundo, distribuyen rosas a los participantes devotos y durante la misa el sacerdote las bendice.