La población de Caicara, capital del municipio Cedeño, ubicada al noreste del estado Monagas, fue fundada el 20 de abril de 1731 por Fray Ambrosio de Bleza, por lo que cumplirá este jueves sus 292 años.
Desde hace tiempo es referencia cultural internacional por la tradición del Baile del Mono, que se realiza cada 28 de diciembre y honras a los pueblos originarios de la zona.
Sin embargo, en los últimos años comenzó a posicionarse como la zona agroindustrial por excelencia del estado Monagas debido a sus tierras fértiles, aptas para la siembra de maíz, tomate, ají dulce y lechosa, entre otros muchos rubros vejetales. Además, la empresa privada también se ha instalado en el lugar con la producción de tabaco.
En Caicara está la Planta «Juana Ramírez» recuperada por el Gobierno nacional, que cuenta con equipos completamente automatizados y tiene la capacidad de procesar un millón 330 mil kilos de maíz al mes.
De igual forma, está la Planta Procesadora de Tomate «La Caicareña», que recientemente fue supervisada por el alcalde Daniel Monteverde para, con apoyo de la Gobernación del Estado Monagas, activar la producción de pasta de tomate y la salsa tipo ketchup para su distribución en la entidad como parte del proyecto Monagas Potencia Agroindustrial.
Con referencia al tabaco, en la zona hay más de 80 productores que trabajan articuladamente con el sector privado, generando un importante número de empleos directos e indirectos.
También es importante mencionar el trabajo que ha desarrollado el alcalde Monteverde en la recuperación del sistema de riego, instalado en 1973, siendo uno de los más grandes de Latinoamérica.
Las canales abastecen de agua a toda la ribera izquierda del Guarapiche, desde Los Cardones (parroquia San Félix) hasta Merecure y parte de Los Bajos de Bejucales (parroquia Caicara) ,lo que potencia la producción y sostiene el empleo y la economía de Caicara.
Más de 19 kilómetros del afluente principal de los productores fue atendido con la reparación y desmalezamiento de las bateas, beneficiando a unos 200 agricultores.
En la localidad existen grandes yacimientos de cal manejados por la empresa Ouro Branco, mientras que el petróleo está presente en varias zonas, explotándose en los caseríos Potrerito, Medina, Pirital y Bejucales.
El caicareño se caracteriza por su sencillez y calidez humana. Cada hogar está lleno de amor, risas y anécdotas de tiempos de antaño. El turista pasa muy pronto a ser un integrante más de la familia.
Es típico el famoso sancocho de guaraguara. Dicen, de acuerdo a la cultura de la localidad, que quien prueba este exquisito plato se queda en este terruño.
La profunda fe cristiana es parte esencial de los lugareños, quienes cada 4 de agosto celebran las Fiestas Patronales en Honor a Santo Domingo de Guzmán.
Jesús «Chucho» Guevara Febres, cronista de la región, dice que la procesión constituye un verdadero reencuentro de los caicareños que se han ido lejos y se reúnen cada año con amigos familiares y su querido pueblo.
«Santo Domingo de Guzmán es para el pueblo de Caicara y sus amigos visitantes un factor aglutinante de fervor, unión y sentimiento de posesión. Es Santo Domingo (después del Mono) el símbolo más representativo del caicareño. A través de la fe y amor por el Todopoderoso, propios y visitantes se integran cada 4 de agosto», aseveró.
Aunado a esto, se encuentra el Festival Sol de Caicara, evento que enaltece la música llanera y se celebra desde el año 1996.
En el Festival participan las categorías Letra Inédita, Voz Recia (masculina y femenina), Contrapunteo y Pareja de Baile. Se realiza a finales de julio o en los primeros días de agosto en el marco de las fiestas del Santo.
Sin embargo, por sobre todos estos acontecimiento socio-culturales está la máxima expresión folklórica del estado, el Baile del Mono, que llena de colorido las calles de la localidad mientras las 29 parrandas moneras ponen a bailar (agarrados por la cintura) a todos los que se dan cita en el Monódromo cada 28 de diciembre.
En Caicara también hay lugares muy atractivos para el turista, como la Bajada de Santo Domingo, donde se ubica un monumento construido en 1970, que mide 12 metros y está compuesto por una cruz y varias divisiones de cemento elaboradas con piedras. Se dice que en ese lugar apareció la imagen del Santo Patrono por primera vez.
Desde ese espacio se pueden apreciar los paisajes y montañas del municipio; así como hermosos atardeceres llenos de colores y brisa fresca.
Igualmente tenemos el casco histórico de la ciudad, compuesto por la Casa Museo “Argelia Cardiel”, que mantiene viva su esencia colonial y dentro de su estructura reposa cada trabajo realizado por los artesanos de la zona; el árbol de aceite de la calle Miranda, que tiene más de 300 años y se niega a morir; la iglesia Santo Domingo de Guzmán, cuya construcción inició en el año 1949 y es de estilo románico con líneas clásicas.
En la zona también se puede disfrutar del río Guarapiche, con sus majestuosos pasos Maraquero, El Limón y El Cementerio, que en temporadas de Carnaval, Semana Santa y Navidad son los lugares predilectos de los turistas y residentes.
Vía | Prensa Oficial