El eclipse es uno de los fenómenos astronómicos más increíbles que podemos observar en el cielo y existen dos tipos: solar y lunar. Un eclipse solar parece transformar el día en noche, mientras que un eclipse lunar parece borrar la Luna del cielo.
Aunque parece lo contrario, los eclipses son una gran fuente de energía y tienen un fuerte impacto en los seres vivos y en la naturaleza. Algunas de las conductas de los seres humanos pueden verse modificadas cuando ocurre este fenómeno, como en el caso de las emociones, los sentimientos o los deseos.
El alto impacto que pueden tener los eclipses en la energía de los seres humanos, puede ser tanto positiva como negativa. Aunque científicamente no existen evidencias que prueben que dicho fenómeno afecta a la salud de las personas, es cierto que al ser una gran fuente de energía, pueden llegar a afectarnos psicológicamente y a nuestras emociones.
Cuando este fenómeno ocurre, la gravedad cambia mínimamente por unos segundos, por lo que es normal que padezcamos dolores de cabeza, nos sintamos un poco melancólicos o más ansiosos de lo habitual. Entre los ‘efectos secundarios’ también se encuentran el insomnio, la confusión o la angustia. Por este motivo, muchos astrólogos aconsejan no llevar a cabo trámites de gran importancia, como firmar contratos o tomar decisiones importantes, durante los días previos y posteriores al eclipse.
En un eclipse es el momento de nutrirnos bien, hidratarnos, escuchar al cuerpo y sus necesidades, y darnos tiempo y espacio para conectar internamente. La meditación o escuchar música nos ayudará para calmar la mente.
Lo que sí recomiendan algunos astrólogos es hacer un ritual si quieres cambiar algo de tu vida o evitar que se repitan ciertas cosas. Puedes coger papel y boli, y anotar lo que ya no quieres que esté en tu vida. Después solo tienes que quemar la nota en el momento del eclipse solar.