Luego de que el Congreso de El Salvador destituyera a algunos de sus magistrados y al fiscal Raúl Melara, el gobierno de Estados Unidos se pronunció para cuestionar las decisiones del Ejecutivo representado por Nayib Bukele.
“Siguiendo con preocupación los últimos eventos en El Salvador, que cuestionan el funcionamiento del Estado de derecho y la separación de poderes”, dijo el alto representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell.
A través de su cuenta oficial de Twitter, el funcionario estadounidense que la seguridad “jurídica y física de los magistrados en el ejercicio de sus funciones debe ser plenamente garantizada”.