Convertido en un vertedero de basura se encuentra el caño que conecta a los sectores Las Cocuizas y Brisas del Guarapiche en la ciudad de Maturín.
La problemática va más allá de tirar los desperdicios y desechos sólidos en el lugar, la situación se agrava debido a que al lado del cauce se sitúa el geriátrico Dr. Marcos Serres Padilla, donde conviven más de cuarenta abuelos.
Las personas de la tercera edad deben soportar los constantes olores nauseabundos que se generan en el basurero, muchas veces de animales muertos que son lanzados en el espacio y que con el pasar de los días inician su estado de descomposición.
En el lugar también es notorio observar gran cantidad de papeles higiénicos usado, lo que impregna el ambiente de un aroma nada agradable. “Lo peor es cuando allí queman la basura, es insoportable estar acá en el geriátrico porque el olor no se aguata y aparte por el humo que se genera perjudica la tranquilidad y la salud de todos nosotros y de las personas que acá laboran”, aseguraron los abuelos.
Solicitaron a las autoridades municipales o regionales enviar una cuadrilla de trabajadores que ayuden a lograr la limpieza y saneamiento del caño a fin de evitar la proliferación de animales transmisores de enfermedades y la quema que basura.