La población de Barrancas del Orinoco se ha convertido desde hace unos cuantos meses en una autopista fluvial para la migración por el sur del estado Monagas, debido a la fácil conexión con Guyana y Trinidad, mediante el río Orinoco.
Según se pudo conocer mediante la divulgación de unos videos por redes sociales, dos embarcaciones con más de cincuenta personas, entre ellos niños, estarían a la deriva en aguas altas del llamado río padre.
“Tenemos cinco días en el agua, necesitamos ayuda, tenemos niños que están presentando alergias y requieren agua. No nos queremos regresar para Venezuela porque no está en condiciones, necesitamos estar en un lugar seguro”, se puede oír de una de las mujeres a bordo de una lancha mientras sujeta a un niño.
Hasta ahora, ningún ente con competencia ha emitido ninguna información al respecto ni se ha confirmado que los venezolanos hayan regresado al país, por lo que se presume aún permanecen sin rumbo fijo en las aguas.
Al parecer, cada cinco o siete días salen embarcaciones desde la capital del municipio Sotillo con destino a los países antes mencionados, sin embargo, debido a la disputa fronteriza por el Esequibo, el gobierno venezolano ha incrementado la presencia de vigilancia en las frontera marítimas, lo que ha impedido en reiteradas oportunidades el ingreso de los venezolanos a estos territorios.
Quienes han logrado pisar tierra firme, deben sortearse la vida por permanecer a resguardo o exponerse a la extradición.
Redacción