Desde hace tres años, dos familias se han asociado para recolectar cartones y plástico para vender en plantas recicladoras y de esta manera poder sobrevivir a la crisis.
Manuel Calzadilla quien trabaja en esta materia, cuenta que la situación actual llevó a reinventarse y así tener un ingreso extra.
Cuenta que deben reunir grandes cantidades de cartón para luego venderlo a un precio que puede variar entre 50 y 60 dólares por tonelada.
Entre él y su socio, salen todos los días a diferentes comercios chinos del centro, farmacias, zapaterías y otros establecimientos en horas de la tarde cuando estos están cerrando para recolectar estos materiales que luego son separados para ir acumulando.
Pero también acuden a centros comerciales donde consiguen importantes cantidades de plástico y cartones, que al reunir varias toneladas, son llevados a centros de reciclaje entre ellos uno cerca de la UDO y otro en la Bella Vista.
Cobertura de actualidad y avances innovadores, con un enfoque en sucesos locales, política y más.