El presidente de la República, Nicolás Maduro, durante su intervención en el marco de la XV Cumbre de los países BRICS, no dudó en apuntar que “la realidad de los últimos años ha puesto en evidencia la necesidad de avanzar en el proceso de desdolarización de la economía mundial, ante el uso y el abuso indiscriminado de la moneda estadounidense como mecanismo de guerra económica contra los pueblos libres del mundo”.
El mandatario señaló que, de acuerdo con estudios recientes, “han demostrado que al menos 30 naciones, 28 % de la población mundial: alrededor de 2.178 millones de seres humanos, se encuentran afectados por sanciones imperialistas y otras medidas de extorsión y guerra económica. El daño a nuestras economías y modelos de desarrollo es innegable”.
Asimismo, reiteró que «es nuestro deseo incorporarnos al Consejo de Think Tanks los BRICS para contribuir con nuestra modesta experiencia a contrarrestar los efectos perniciosos de las sanciones de occidente contra las economías del mundo, así como el desmontaje del sistema de dominación financiera y comercial».
Resaltó que el «llamado a ampliar su membresía representa la esperanza para quienes en nuestro noble y modesto propósito tenemos la voluntad de aportar desde diferentes perspectivas, a ser parte de un nuevo modelo de desarrollo que viene creciendo bajo el liderazgo de los BRICS y que, sin duda, encuentra hoy, en esta magna reunión de Johannesburgo, un trascendental punto de impulso hacia el futuro».
Además el presidente Maduro enfatizó en la necesidad de avanzar en el proceso de desdolarización de la economía mundial y compartió cifras de las consecuencias de este modelo.
Reiteró que los Brics consolidan bases muy sólidas de cara a la construcción de un nuevo sistema mundial verdaderamente libre, inclusivo, justo y solidario, donde se restituyan los principios del Derecho Internacional, amenazados por el viejo sistema hegemónico imperial.
En consecuencia, “la implementación de estas medidas incide negativamente en el disfrute de los Derechos Humanos, reconocido esto por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en marzo de 2023”.
En esa línea, bajo la visión multipolar, para el desarrollo de cada uno de esos polos, el Jefe de Estado ratificó que desde “Venezuela unimos voluntades para la configuración de una nueva arquitectura financiera que permita realizar nuestras transacciones con novedosos medios físicos y digitales, y con una amplia canasta de monedas nacionales, así como acceder a nuevas formas de financiamiento que contribuyan a la recuperación y el crecimiento de nuestras economías”, en el que “en el caso de Venezuela crecimiento proyectado por encima del 5 %, en este año 2023, el más alto de la región, de acuerdo a la CEPAL, Comisión Económica para América Latina y el Caribe de la Organización de las Naciones Unidas”.