Familiares de los detenidos en el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), delegación Maturín, acudieron a la sede de El Periódico de Monagas, para denunciar las diferentes irregularidades que están sucediendo dentro del centro de detención temporal.
Manifestaron que existe un hacinamiento en uno de los calabozos del cuerpo detectivesco, destacando que hay más de 300 detenidos en un solo pabellón con una medida de 4×4, lo que ha causado que los reclusos contraigan sarna, bacterias, problemas respiratorios, y forúnculos (nacidos).
En este sentido, hacen un llamado a la Ministra de Servicios Penitenciarios, Myrelis Contreras, para que se aboque en atender esta situación. Asegurán que el hacinamiento es tal que los aprehendidos se turnan para dormir debido al poco espacio en el lugar.
Asimismo, señalan que hay privados de libertad que tienen mucho tiempo esperando ser trasladados hasta el Centro de Formación para El Hombre Nuevo, conocido como “Nelsón Mandela”, o que inicie el proceso judicial.
Marleny Mota, madre de uno de los detenidos, manifestó que al momento de entregar la comida a sus familiares, reciben malos tratos y humillación por parte de los funcionarios del Cicpc.
“El retardo procesal es muy grande, siempre suspenden las presentaciones o los juicios en tribunales por cualquier excusa”, resaltó Zuleima Martínez, familiar de uno de los privado de libertad.
José Manuel Cordova, quien tiene a un hijo detenido desde hace ocho meses, manifestó su preocupación por el estado de salud de su pariente ya que presenta una lesión en una de sus piernas.