Como parte de las políticas sociales que lleva a cabo el alcalde del municipio Sotillo en el estado Monagas, José Gregorio Maldonado; desde el ayuntamiento se trabaja de manera incansable para garantizar el servicio de agua potable en las comunidades de la entidad sureña.Según lo dado a conocer por el burgomaestre, un total de nueve bombas electrosumergibles han sido instaladas en estos primeros cuatro meses del 2024, con el propósito de aumentar el caudal y mejorar la calidad de vida de más de tres mil 700 familias de las parroquias Barrancas del Orinoco y Los Barrancos de Fajardo. MIRA TAMBIÉN Alcalde de Sotillo atiende contingencia por incendios en Uverito MIRA TAMBIÉN Alcalde de Sotillo atiende contingencia por incendios en Uverito Maldonado destacó que los equipos son de diferentes capacidades, según la demanda de las comunidades y los puntos donde han sido instalados a fin de optimizar el recurso hídrico. Resaltó que las bombas colocadas en la parroquia Barrancas del Orinoco están situadas en: Bomba de 25 HP en el sector El Peso, beneficia a mil 500 familias. Bomba de 7.5 HP en la comunidad fluvial Apostadero, mejorando la calidad de vida de 200 familias. Bomba de 20HP en la comunidad Simón Bolívar, con la cual se benefician 400 familias. Bomba de 1.5HP en la comunidad Josefera y una bomba de
Cada 22 de marzo se conmemora el Día Mundial del Agua, fecha en la cual se busca concienciar a la población y autoridades sobre la importancia de darle el buen uso a este recurso y de preservar las cuencas hídricas.El agua es un derecho fundamental y toda persona debe tener acceso a ella de forma fácil, sin embargo, esa realidad es muy diferente en Venezuela y aún más en el estado Monagas.Cientos de comunidades en la entidad oriental sufren al no disponer del líquido de forma continua a través de la red de aguas blancas.En algunos casos como en el barrio Brisas del Morichal de Maturín, las aguas servidas se confunden con la potable, haciendo que exista un foco de contaminación gravísimo para quienes habitan en la mencionada barriada maturinés.En La Muralla, La Murallita, Los Cortijos y El Silencio; son otros los sectores de la capital monaguense que constantemente están padeciendo la falta del llamado vital líquido.Quienes habitan la populosa comunidad de Los Guaritos también han vivido en carne propia este calvario, sin embargo, según lo expresado por ellos la situación ha mejorado un poco en los últimos años.Los botes de agua blancas en la ciudad están a la hora del día y esparcido a lo largo y ancho de las 10 parroquias que conforman el municipio capital.Más allá de