En pro del fortalecimiento de los Cuadrantes de Paz y en apoyo al sector ganadero del país, funcionarios de la Delegación Municipal Anaco, tras un minucioso trabajo de investigación, lograron la ubicación y captura de seis hampones que conformaban la banda delictiva apodada Los Azotes de Freites, quienes se dedicaban al robo de ganado en el estado Anzoátegui.Tras conocer los diversos hechos delictivos cometidos contra los ganaderos de la entidad, se activaron varias comisiones de la Policía Científica, quienes se encargaron de realizar el proceso de investigación, donde se pudo conocer que los responsables de los robos fueron: Angel Luis Marcano Hernández (32), Luis Enrique Marcano Hernández (28), Reinaldo José Marcano Hernández (32), los tres son funcionarios públicos; así como Franklin José Hernández Figuera (38), apodado El Tin, quien tiene registros por droga, porte ilícito de armas de fuego y abigeato; Francisco Antonio Hurtado Rondón (30), apodado El Mecánico y Francisco Javier Rodríguez Santoyo (26), apodado El Papo.Estos tenían como modus operandi, ingresar de manera violenta a fincas y fundos de la zona en mención, someter y maniatar a propietarios y trabajadores de las mismas, donde bajo amenazas de muerte, los despojaban de sus pertenencias de valor, a su vez, se apoderaban del ganado, el cual trasladaban a bordo de un vehículo de carga pesada, aún por recuperar; para trasladar
El Cicpc esclareció un crimen ocurrido en Maturín, con la captura de dos trabajadores de un fundo.La víctima mortal respondía al nombre de Jesús Enrique Ramos, de 19 años, y según la información suministrada por el director nacional del cuerpo detectivesco, Douglas Rico, este se dedicada a introducirse en las fincas para apoderarse de tablas de madera y de las reses que se encontraban en corrales.Trascendió que, cansado de esta situación, Luis Armando Lima González (54) y Ronni Antonio Rivas Rojas (34) decidieron dar un escarmiento al responsable de los robos en la finca.Resulta ser que, optaron por sorprender al presunto implicado para secuestrarlo y acabar con su existencia.El hecho de violencia tuvo lugar, según el Cicpc, en la parroquia San Simón de Maturín, mientras que el arresto de los hombres se llevó a cabo en la avenida Alirio Ugarte Pelayo.El caso quedó a la orden del Ministerio Público para el debido proceso.