El emblemático evento que marca la Semana Santa en la vida activa de los católicos es la procesión de Jesús Nazaret y Maturín lo dejó claro este Miércoles Santo, cuando esperó en las puertas de sus casas, en clínicas, balcones y ventanas, por la visita de Jesús de Nazaret.
Pidieron porque cese la pandemia, con una emoción indescriptible, con una profunda fe en Dios y acompañados por la palabra armónica de consuelo y amor de cada uno de los sacerdotes y quienes le acompañaron en tan magno recorrido.
«Que disipe la pandemia que nos aqueja» fue el clamor de todos los que con manos en altos estuvieron en las clínicas y hospitales emblemáticos en Maturín.
El recorrido se hizo muy emotivo, especialmente en la zona de las Clínicas, Las Brisas, Las Cocuizas, la Av. Libertador y el centro centinela el Manuel Núñez Tovar.
Las Brisas se arrodilló en pleno
Familias enteras salieron a las afueras de sus casas y de rodillas se acercaron a Jesús de Nazaret. Agradecieron que Jesús de Nazaret les fue a visitar, cuando todos están dentro de casa, por la pandemia que nos aqueja.
Al sitio se hizo presente, para permanecer en el recorrido, Raúl González, director de Protección Civil en la entidad monaguense. Quien como un siervo más oró por el cese de la pandemia y mantuvo, con su equipo la atención para quienes se acercaban a El Nazareno.
El monaguense Henry Silva, animador, médicos, cantante y locutor, se hizo presente en los diferentes escenarios haciendo un cántico de su autoría a Jesús de Nazaret. «Todo de lo debo a él». Una hermosa canción que el pueblo de Dios supo entonar con él para agradecer al señor «que nos abandona en esta hora de dolor y de temor» dijo Silva al dedicar una canción a todos sus colegas médicos que hoy arriesgan su vida en los diferentes centros de salud del estado.
En motos y bicicletas se dejaron ver algunos creyentes, al consultar a uno de ellos dijo «estoy aquí encomendado a Dios en todo momento, y porque tenemos muy arraigada la creencia en Dios y somos católicos de toda la vida, no podía dejar de acompañar al Nazareno, este es un sacrificio, por el mundo, por Venezuela, por la familia y el hogar»
«Mi hijo mayor vio Jesús en el calvario y sentido dolor, me dijo «papi porque me hicieron eso. El a su corta edad sintió ese dolor, mi hijo se llama Jesús en honor al corazón de Jesús» dijo Ronald Brito quien junto a su esposa acompañó el recorrido con su esposa en una moto. «vine a pagar una promesa desde la moto, vine con mi esposa. Vine porque me sentía comprometido»
Marleni Cedeño, otra de las creyentes que se acercó a la procesión dijo «Estoy acá por la paz de Venezuela y el mundo, por eso estoy aquí»
A este clamor se unieron médicos intensivistas de la Unidad de Cuidados Intensivos en diferentes clínicas de la ciudad.
Motorizados a las afueras del Núñez Tovar
Entre tanto en las afueras del hospital Manuel Núñez Tovar y mientras Jesús de Nazaret recorría calles y avenidas de Maturín, un grupo de motorizados se arrodilló y oro por la salud de todos los que están dentro del centro de salud, producto de la Covid-19.
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