A través de su cuenta de Twitter, la ONG “ Ventana a la libertad” informó que dos privados de libertad del Complejo Penitenciario de Carabobo, también conocido como penal de Tocuyito, en el municipio Libertador del estado Carabobo, murieron por presunta tuberculosis y por desnutrición.
Familiares del joven de 21 años, de nombre Jesús Daniel Rangel, informaron que falleció el jueves 20 de mayo en horas del mediodía. El joven tenía tres años recluido en el área que se conoce como La Mínima, cumpliendo una sentencia de cuatro años.
Una hermana y la abuela de la víctima, sostuvieron que Jesús Daniel a los 17 años abandonó el quinto año y se dedicó a trabajar como vigilante en un establecimiento dedicado a la venta de cauchos para ayudar con los gastos de la casa.
Hace tres años, cuando estaba de guardia se metieron varios ladrones y lo sometieron. Luego que lo golpearon lo amarraron. Los delincuentes después que robaron varias cosas de valor lo dejaron abandonado en el suelo.
“Por ese delito que no cometió condenaron a mi nieto a cuatro años de prisión, cuando solo era un adolescente; y esperaron que cumpliera los 18 para pasarlo al penal de Tocuyito”, dijo la abuela.
La hermana por su parte comentó que la enfermedad de tuberculosis lo fue consumiendo, pero que nunca recibió atención médica. “Llegó un momento en que mi hermano que no quiso comer más”.
Jesús Daniel Rangel falleció alrededor del mediodía, pero no fue hasta las 4:00 de la tarde cuando un compañero de celda, con quien el joven trabajaba dentro del recinto carcelario, les avisó.
Otro caso fue el de Jerri Quintero, recluso fallecido igualmente en La Mínima del penal de Tocuyito. Según allegados, este murió por tuberculosis y desnutrición aproximadamente a las 11:00 de la mañana del viernes 21 de mayo.
Por otra parte, se conoció del fallecimiento de un joven de 18 años identificado como Ángelo Barcaza, en uno de los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) Subdelegación Valencia, también conocida como Subdelegación Plaza de Toros, indicó la ONG.
La madre de este privado de libertad dijo que su hijo desde que fue llevado a esa subdelegación en diciembre de 2020, fue perdiendo peso hasta que falleció.
Muere otro preso en Monagas
También en Maturín, del estado Monagas, un privado de libertad murió con síntomas asociados al COVID-19. Según registros de la morgue del Hospital Manuel Núñez Tovar, el deceso del hombre de 50 años ocurrió la tarde del domingo 23 de mayo.
La víctima fue identificada como Carlos Andrés Brito. El hombre estaba recluido en el centro de detención preventiva del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Subdelegación Maturín. El acta de defunción refiere que Brito sufrió insuficiencia respiratoria.
La organización detalla que el cuerpo del recluso fue trasladado a las 5:40 de la tarde del domingo por una comisión de funcionarios del Cicpc. Luego, autoridades del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses ordenaron llevarse el cadáver directamente hasta el cementerio municipal de Maturín.
El lunes, 24 de mayo, familiares de otros detenidos denunciaron que hay reclusos con síntomas del coronavirus. Ellos dicen que presentan fiebre y que han perdido el gusto y el olfato. Ante la ausencia de jornadas médicas, los allegados solicitaron a la directiva del Cicpc permitir el ingreso de médicos que atiendan a los detenidos.
Los denunciantes sostienen que la última vez que hubo una jornada de atención médica fue en enero, antes de que la directiva del Cicpc fuese cambiada. En esa oportunidad descartaron coronavirus y otras enfermedades.
Los familiares también dijeron que existe un brote de escabiosis entre los detenidos que no ha sido atendido. Al parecer esto ocurre desde febrero de este año 2021 y que algunos detenidos ya han sido llevados hasta el Hospital Manuel Núñez Tovar, por atención médica ante la insistencia de los familiares a través de los abogados.
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