Vecinos de diferentes sectores de la ciudad de Maturín, denuncian la quema indiscriminada de desechos sólidos y terrenos para la siembra, lo que afecta a niños, adultos mayores y pacientes de covid-19 que están siendo tratados en sus viviendas.
Luego de un largo tiempo, este tipo de prácticas vuelve a verse en diferentes puntos de la ciudad, según el reporte recibido en el canal de denuncias de El Periódico de Monagas.
Habitantes del sector Las Brisas de Santa Elena, parroquia Boquerón, indicaron que algunos vecinos se están dedicando a la quema de basura y monte a cualquier hora del día.
«No les importa que sea de madrugada para prenderle candela a los desperdicios. El humo invade todo y los niños pequeños se han asfixiado por la inhalar el humo», dijo una denunciante que prefirió no indicar su nombre.
Esta situación se repite en la Zona Industrial, al oeste de la ciudad. Residentes de los complejos urbanísticos también se han visto afectados por la quema de basura y de la maleza.
«Aquí pareciera no haber leyes porque la gente quema de noche y nadie puede descansar. Los asmáticos y quienes tenemos familiares en tratamiento por covid-19 son quienes se llevan la peor parte, se desesperan por el humo y el pecho comienza a trancárseles», explicó una vecina de la urbanización Laguna Paraíso.
En los sectores La Cruz, La Pica, La Línea, San Jaime, Santa Inés, El Silencio, Las Cocuizas, entre otros, sucede lo mismo.
En el caso de Las Cocuizas prenden fuego en un terreno baldío al frente de la redoma, las columnas de humos alcanzan gran altura e impide también la visibilidad de los choferes en la avenida principal.
Los afectados piden a los organismos de Ambiente y de la guarneria ambiental revisar la situación y tomar las acciones necesarias para evitar que siga produciéndose la quema indiscriminada.
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