Siempre que se levanten las sanciones que pesan sobre el comercio de hidrocarburos de Venezuela, Citgo podría suministrar entre 100.000 y 150.000 barriles diarios – o «quizás más» – de combustibles al país a cambio de crudo, indicó su presidente ejecutivo Carlos Jordá a la agencia especializada Argus.
Citgo es ahora una refinería independiente «de facto», dijo Jordá, pero puede cumplir un rol de «puente» o intermediario durante un período de transición política y reconstrucción.
No obstante, el ejecutivo dejó en claro que cualquier acuerdo futuro con Pdvsa deberá ser independiente y tener sentido económico para ambas partes.
De hecho, al igual que el resto de las refinadoras estadounidenses, Citgo tiene restringido el suministro a Venezuela mientras se mantengan las sanciones. Y aunque Estados Unidos ha autorizado recientemente la venta de Gas Licuado GLP a Pdvsa, la filial estadounidense no es un proveedor especializado en GLP.
Incluso si accediera a suministrar productos, Jordá dijo que la prohibición continuada de los intercambios frustra cualquier acuerdo, porque los proveedores necesitarían un prepago en efectivo, que es poco probable que Pdvsa proporcione.
En la práctica, Citgo ya ha dejado atrás sus raíces como consumidor de materia prima venezolana.