Habitantes de la urbanización Alberto Ravell de la parroquia San Simón denuncian estar cansados de cargar agua ante la falta reiterada del servicio.
Manifiestan que casi a diario deben caminar hasta una toma ubicada al lado del preescolar para llenar sus recipientes y poder abastecerse. Expresan que el problema con la falta del recurso hídrico no es nueva sino que data de hace varios años.
A pesar de los llamados que desde hace tiempo han hecho a través de los medios de comunicación para que Aguas de Monagas solvente el problema no han recibido respuesta.
Para poder preparar alimentos y tener agua para su consumo, los residentes deben comprar al menos dos veces a la semana botellones cuyo costo oscila el millón y medio de bolívares.