Boquerón de Amana, es una de las comunidades de Maturín más visitadas durante los diferentes asuetos y fines de semana, por lo que su balneario es el punto turístico por excelencia de la zona.
El agua del rio filtrada por los morichales, hacen que cientos de personas acudan a ellas para refrescarse de las fuertes temperaturas y más aún cuando se aproxima el verano que incluye la temporada de carnaval y semana santa.
Sin embargo, los habitantes de la comunidad y particularmente los residentes en las inmediaciones del balneario, solicitan a las autoridades gubernamentales un plan que les permita mejorar las condiciones de los kioscos y de lo que consideran como un pequeño “malecón”.
“Lo que pedimos es que nos apoyen con pintura para darle un nuevo rostro al espacio, así como materiales para adecuar las instalaciones sanitarias y brindar de esta forma una mejor atención a los temporadistas que nos visitarán no solo en carnaval, sino de forma constante porque los fines de semana esto luce colmado de personas que vienen a pasar un rato diferente”, aseguró Maricruz Ramos.
Ramos, aseguró también que se deben colocar varios contenedores de basura a lo largo del balneario para que los visitantes depositen los desechos y evitar de esta manera la acumulación de basura.
Otra de las solicitudes de la residente es la implementación de un punto policial, no solo durante temporadas altas, sino los fines de semanas que garanticen la seguridad de los bañistas y residentes.
“Esto es un lugar de ambiente familiar donde muchas personas vienen a disfrutar y aprovechan de traer sus botellas de alcohol por lo que se hace necesario contar con presencia policial para evitar cualquier altercado”, apuntó la mujer.
Solicitó a las autoridades encargadas tomar en cuenta su planteamiento para que esta forma la comunidad sea punto de referencia y parada obligatoria de foráneos que buscan en Maturín un sitio de esparcimiento que conjuga naturaleza, paisajes y recreación.