Sobre los hechos ocurridos en el Cicpc Maturín, una fuente interna al cuerpo policial se comunicó con El Periódico de Monagas para aclarar que los protocolos implementados para la recepción de alimentos, agua potable y ropa son medidas de seguridad y bioseguridad, a fin de resguardar la integridad y salud tanto de privados como de familiares y funcionarios.
La fuente dijo “garantizamos el debido proceso y los derechos de cada persona que se encuentra detenida en estos espacios. Las personas deben comprender que por motivos del covid-19, no podemos permitir aglomeraciones en las instalaciones y por ello se establecieron ciertos parámetros para dar cumplimiento a los medidas de bioseguridad, para protegernos todos”.
“Se les ha indicado a los familiares que deben permanecer a una cierta distancia, lugar donde nuestros funcionarios de guardia se dirigen para recibir los alimentos y demás. Posterior a ello, se procede al proceso de revisión (algo muy rutinario) para evitar que sea ingresada a las celdas algún tipo de artefacto o armas que generen disturbios”, aclaró.
La fuente agregó que este lunes funcionarios de Protección Civil y Administración de Desastres (PCAD) realizaron una jornada de desinfección en los calabozos y demás espacios del cuerpo policial para evitar contagios de coronavirus.
“La desinfección se realiza con hipoclorito de sodio y no se emplean químicos que puedan afectar a los detenidos. Es una actividad que se realiza una vez por mes y este lunes ya correspondía”, resaltó.
En este mismos sentido, se llevó a cabo una jornada médico asistencial en la que fueron vacunados contra la fiebre amarilla y toxoide más de 130 privados de libertad.
“Es una actividad en beneficio de los detenidos, no dejan de ser seres humanos y debemos atenderlos”, finalizó.