El presidente de Colombia Gustavo Petro conversó en exclusiva con el diario español El País, para dar un balance, desde su punto de vista, de la gestión presidencial que ha ejecutado en los casi 100 días que lleva en el gobierno, a cumplirse el próximo 16 de noviembre.
La entrevista se dio en el contexto de su viaje a la COP y a Francia. Y esto fue lo que respondió.
¿Cómo valora sus 100 primeros días? ¿Se los imaginaba así?
R- Ha sido más suave de lo que pensaba. He logrado cosas difíciles. La mayoría parlamentaria, la aprobación de proyectos fuertes. La reforma tributaria está a punto de aprobarse. Hay una defensa en mi gobierno de la ciudadanía, del medio ambiente. La ley de paz, que permite jurídicamente asumir negociaciones -con guerrilleros y narcos-. Y los niveles de aceptación del gobierno siguen siendo altos. Hay nubarrones económicos, claro. La caída del peso debería ponernos en una expectativa exportadora, que es lo lógico, pero no tenemos aparato productivo. Tenemos una economía petrolera anquilosada.
¿A qué pactos ha llegado con Maduro?
R- No hay pactos secretos. El tema de la frontera va más lento de lo que creía. Durante los años en los que no tuvimos relaciones Colombia y Venezuela, un tiempo de vacío estatal, se creó un poder mafioso sobre el comercio, con una capacidad enorme de destrucción de la población que tenía que transitar de un lado a otro. Al abrirla ahora, nos toca chocar con ese tipo de estructuras criminales.
¿Y tiene usted la capacidad militar suficiente para enfrentarlas?
R- Sí, y más si nos coordinamos con Venezuela. Lo que pasa es que eso nos demora tener normalidad entre los países. Yo propuse la entrada de Venezuela al Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Maduro lo está evaluando. En la práctica significa -y fue el tema de mi conversación personal con él- aceptar que la democracia liberal es parte de la agenda progresista en América Latina.
¿Fue osado hablarle a Maduro en persona de democracia liberal durante su visita a Caracas?
R- Sí. Si uno mira los últimos triunfos electorales, el de Boric, el de Lula, el mío, hay un cambio en América Latina. Es el triunfo de grandes frentes democráticos, es la izquierda frente al fascismo. Rechazar la democracia liberal lleva hacia dictaduras y autoritarismos como se vienen presentando en algunos países de América Latina.
¿Se refiere a Venezuela?
R- (Risas). Me refiero a países autoritarios en América Latina en general. Defender la democracia liberal me parece que es importante para toda América Latina y para Venezuela. ¿Es difícil? Es muy difícil. Porque siempre está en el ambiente la destrucción física. Nuestras derechas no son democráticas. Una vez las derechas se hacen el poder, matan. Ese es el gran temor que hay en Venezuela.
Cobertura de actualidad y avances innovadores, con un enfoque en sucesos locales, política y más.