Los constantes apagones son el pan diario que deben soportar quienes habitan en el municipio Aguasay, al oeste del estado Monagas.
No existe hora fija del día ni de la noche para que el servicio eléctrico sea interrumpido sin motivo o razón justificada, lo que agobia aún más la tranquilidad de quienes residen en la comunidad.
Según relatan sus habitantes hasta dos y tres veces al día falla la energía eléctrica, incrementando así la desesperación de los moradores por el inclemente calor que se genera por la época.
“Estamos cansados de la situación y ya no la aguantamos más, esto pareciera ser un castigo a este pueblo que es noble y servicial”, acotó Leomaris Marchan, quien reside en las inmediaciones de la plaza Bolívar de la tierra de la Curagua.
Pareciera ser que el pueblo que en su seno guarda celosamente un Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, declarado por la Unesco, no pega una. La poca señal telefónica es otro de los problemas que mantiene en zozobra a quienes hacen de este poblado su hogar.
Son pocos los lugares donde los aguasayeros pueden disfrutar de conexión a internet, realizar o recibir llamadas. Relatan los moradores que deben acudir a la avenida principal, situada en la entrada del poblado y allí hacer uso de sus teléfonos celulares ya que es el área donde mayor señal y conexión poseen.
En la referida arteria vía no existe un árbol que pueda brindar sombra durante el día y en las horas nocturnas se exponen a ser víctimas de la delincuencia.
Se pudo conocer por fuentes extraoficiales que el alcalde de la entidad, Eduardo Maurera, ha realizado labores de solicitud de apoyo a la empresa estatal Cantv, a fin de ampliar la red de telecomunicaciones por el municipio, lo que representaría un gran impacto en todas las áreas de la vida social y comercial.