En Monagas destacan el compromiso de ciudadanos que luchan por el servicio social

Un grupo de personas, la mayoría vinculada a los gremios ha venido trabajando en el reconocimiento que fuera del contexto político busca consolidar el concepto de ciudadanía.

Se trata de gremios profesionales, maestros, trabajadores, en fin ciudadanos; algo que va más allá de la militancia política que cada uno pueda tener, de sus intereses, incluso de las ideologías necesarias en toda sociedad. Pero ¿Qué significa ser un ciudadano? Se refiere a las personas que son miembros de una comunidad y que tienen derechos plenos.

Este sábado un grupo de personas recibieron ese reconocimiento. Los médicos Luis Hernán Amundaray, Pablo Morillo Robles y Hugo Febres. Los Ingenieros Manuel García Barreto y Noel Rojas. Trabajadores sociales en la comunidad como Marbelys Tibisay Rojas y Elías Lisboa. Los Periodistas Ernestina Herrera y Jesús Antuárez. El entrenador deportivo de Los Criollitos de Venezuela, Jesús «Chuo» Machado. Músicos Jesús «Escalera» Barreto y José Apolinar Cantor, Profesor Michael Naraim y Julio Batikka.

Derechos, compromiso y ciudadanía

Tener ciudadanía es ser un hombre o mujer comprometidos con el servicio social,  ajustados al derecho y a la legalidad. No tiene nada que ver con partidos políticos, o con función pública o privada.

El hecho de que conozcamos los derechos que tenemos nos lleva a empoderarnos, es decir, a fortalecer nuestras capacidades, confianza, visión y protagonismo para impulsar cambios positivos en nuestro entorno.

El concepto de ciudadanía es una concepción de justicia, de moral y de los valores que tenga una sociedad. La evolución de nuestra civilización es precisamente la historia de la ampliación de este catálogo de derechos.

Es responsabilidad de los ciudadanos y así lo han entendido quienes recibieron este reconocimiento  que deben proteger y trabajar en pro de los derechos civiles y políticos básicos (como la libertad de expresión, de conciencia, de asociación, de votar), luego los derechos económicos y sociales (como la salud, seguridad social, el acceso a la cultura, al medioambiente sano) hasta los nuevos derechos (como el acceso a Internet, a la identidad y reputación digital o a las garantías frente a la manipulación genética).

Podríamos decir que la ampliación de los derechos se relaciona con la evolución de las sociedades que, con el paso del tiempo, abandonaron las visiones tradicionales de la preeminencia de la comunidad por encima de las personas y adoptaron una perspectiva moral que le dio al individuo el lugar central en los valores colectivos.

Las sociedades modernas, conscientes cada vez más de la importancia de la protección de los derechos, fueron no sólo reconociendo los derechos de las personas pertenecientes a grupos previamente excluidos (mujeres, indígenas, afros, minorías étnicas, personas con discapacidad o pertenecientes a grupos de diversidad sexual), sino que fueron adoptando mecanismos especiales y adicionales para otorgar a todas y todos las oportunidades reales de ejercerlos.

Todas las personas tenemos derecho a la vida, a la libertad de conciencia, a profesar la religión de su preferencia, a viajar y trasladarse de un lado a otro sin que nadie les diga dónde pueden o no ir, a opinar como quieran, a reunirse y organizarse para alcanzar el poder, entre muchos otros.

Sin duda cada una de las personas comprometidas con este compromiso ciudadano consideran la dignidad humana derivada de la voluntad de un Dios o de la naturaleza.

El reconocimiento de los derechos de todas las personas es un ideal ampliamente extendido en las sociedades democráticas. Los derechos son para todas y todos, pero ser ciudadano y ciudadana nos otorga ventajas adicionales: nos permite participar en la vida política de una comunidad y nos brinda protección ante cualquier posible intento de violación de nuestros derechos.

Quienes se han dado a la tarea de exaltar estos conceptos de ciudadanía y que serán buscándolos con el compromiso de ser multiplicadores del mismo son Juan Guzmán Páez, Alejando Abache, Juan Carlos Oronoz, Odalis Level, Jesús Ramos, Diorkis Bravo, Jesús  «Chuo» Ramos, Agustín Arrieta y Antonio Marcano, quienes dijeron continuarían buscando a estas personas que en diferentes actividades, y profesiones están comprometidas con la sociedad monaguense y con la búsqueda de la ciudadanía responsable y activa