Una vigilante del supermercado Carulla, situado en la avenida 140 de Bogotá, protagonizó un nuevo caso de xenofobia. Esta vez dos ciudadanos venezolanos fueron requisados en el reconocido establecimiento en el norte de capital colombiana, reseñó RCN.
Mientras les revisaba los contenidos de las bolsas del supermercado y chequeaba la factura, la vigilante les cuestionaba por estar en el país, detalló el medio en su web.
“Ustedes tienen su historia, ustedes tienen su historia”, le señaló la trabajadora a los dos cuidados venezolanos quienes le reclamaron por estar requisándolos solo a ellos y no al resto de los clientes.
“Se molesta porque le digo que por qué a los otros clientes no los revisan”, señaló uno de los ciudadanos mientras grababa los lamentables hechos.
Tras escuchar las respuestas de la vigilante uno de los ciudadanos le señaló que los colombianos “también” tenían su historia y su fama por los temas del tráfico de drogas.
“Si somos drogadictos ustedes qué hacen acá, ¿por qué no te devuelves?”, le respondió mientras miraba todos los productos de la bolsa y corroboraba airadamente la factura.
Con la voz entrecortada, el ciudadano le señalaba que Venezuela también recibió muchos colombianos en medio de su crisis económica.
“Gracias a Dios no he salido de mi país, a ir a comer mierda a otra parte prefiero ir comiendo acá”, le respondió la mujer mientras lo retaba a que siguiera grabando. “Graba todo, a mi no me interesa”.
Después de corroborar que los productos habían sido cancelados por los dos ciudadanos venezolanos les tiró las bolsas y los productos en el carro. Los afectados le pidieron que metiera los productos en la bolsa ante lo cual recibieron una burla. “Ja, ¿en serio?”.
Tras conocer los hechos, Carulla presentó excusas a los dos afectados y anunció medidas para que estos hechos no se presenten nuevamente.
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