Con el pasar de los días se van conociendo más casos de robos a través del modus operandi de la escopolamina, mejor conocida como ‘burundanga’, una droga que adormece y provoca la pérdida del conocimiento de la víctima.
En los últimos días se han incrementado los casos de robos con esta sustancia en algunos centros comerciales al este de Caracas. Sin embargo, también hay reportes de hechos similares al oeste de la capital, que han puesto en alerta a las autoridades.
En esta ocasión, el periodista Robert Lobo informó sobre un caso que tuvo lugar el pasado sábado en horas del mediodía en el centro comercial Sambil La Candelaria.
«#DENUNCIA Dos mujeres y un hombre están robando con el modus operandi de la ‘burundanga’, dentro del cc La Candelaria, Caracas. Hoy en horas del mediodía una amiga estaba en la planta baja del centro comercial y estas personas la abordaron entregándole unos billetes que supuestamente se les habían caído a un hombre«.
«Ella incauta y de buena fe, los tomó para buscar al hombre y darle el dinero. Pasaron unos minutos y comenzó a sentirse mal. La sacaron del c.c y le abrieron el bolso para extraerle su dinero«, detalló el comunicador.
Agregó que los victimarios querían llevar a la mujer a otro sitio en los alrededores del centro comercial pero la víctima puso resistencia. «Le dejaron en el monedero unos billetes de Bs. 500 impregnados con la sustancia«.
La joven logró dar características físicas de estas tres personas.
“Mujer baja, morena y cabello negro. La otra mujer era blanca, pestañas postizas y cabello teñido de amarillo. Suéter azul. El hombre es un gordo, moreno y dentadura dañada”.
Con el aumento de denuncias por el uso de escopolamina (burundanga), la ciudadanía está en alerta de estas acciones delictivas que ponen en riesgo la vida de muchos caraqueños. Sobre todo adultos mayores y mujeres solitarias, según expertos.
El criminólogo y abogado penal, Luis Izquiel expresó a 2001 que estos casos se reportan con frecuencia en centros comerciales, como el Sambil de Chacao, El Recreo y el San Ignacio.
Este tipo de delitos tiene como objetivo robar a la víctima, quien queda en un estado vulnerable y de fácil manipulación.
Izquiel comentó que hay otro fin delictivo con relación al acoso sexual, razón por la cual el uso de esta droga es común en bares, restaurantes y discotecas.
Cuando se trata de estas situaciones, el criminal vierte la droga en el trago de la víctima, lo que causa síntomas más fuertes. El agresor puede salir con la persona incluso cuando está inconsciente y los testigos no lo verán como una actitud extraña, debido a que asumen que la víctima está bajo los efectos del alcohol.
Estos casos no se reportan en su mayoría porque ni las víctimas, ni los testigos, recuerdan lo que pasó.
El criminólogo resalta que la burundanga no es la única droga que produce tales efectos como: alucinaciones, sueño, sumisión, hipertensión, deficiencia respiratoria y cardíaca.
Con información de Diario2001Online