Cuando faltan solo 12 días para despedir el año, el equipo reporteril de El Periódico de Monagas, consultó a los habitantes de la capital monaguense con relación a la siguiente pregunta ¿Cuál considera usted fue la problemática más grande que se vivió en la ciudad de Maturín durante el 2023?
La respuesta fue al unísono, pareciera que todos los encuestados se pusieron de acuerdo para emitir su opinión: Los apagones.
Según relataron los afectados, no hubo un solo día del año en que no se registraran bajones de luz, aseguran, que fueron sometidos a racionamientos “o como dicen en la empresa, a una administración de carga; pero hasta los momentos nadie ha informado nada de manera oficial”, aseguró Maricruz Milano, quien reside en un urbanismo en la Zona Industrial.
Las fluctuaciones eléctricas podían variar en su tiempo de duración, muchas veces se prolongaron hasta por más de seis horas, y en ocasiones se registraron entre tres y cuatro apagones de forma diaria.
Apagones masivos también se reportaron durante el 2023 en la llamada Ciudad Distinta, decenas de sectores quedaron a oscuras en horas de la noche y sin servicio eléctrico en el día; afectando la cotidianidad de los vecinos.
Los Guaritos, Las Brisas, Las Cocuizas, Zona Centro, Zona Industrial, sectores aledaños a la avenida Bella Vista al igual que en la parroquia Boquerón, fueron sólo algunas de las áreas de Maturín que más se vieron perjudicadas con la problemática.
Los llamados “cortes programados”, ejecutados por la empresa Corpoelec, durante los fines de semana, para mejorar la distribución energética en el municipio, estuvieron a la orden del día. Sábados y domingos eran ejecutados y la interrupción del servicio por lo general era desde las 8 de la mañana hasta las 12 del mediodía.
Otros de los que se vieron afectados por la realidad descrita fueron los comerciantes, quienes se vieron en la obligación de volver a usar las plantas eléctricas a base de combustible para realizar las operaciones y garantizar el servicio a los empleados y clientes.
Quienes habitan en la “Sultana del Guarapiche”, piden en esta época de Navidad como único deseo para el 2024, es que la situación mejore y se acabe definitivamente la problemática que durante el 2023, en ocasiones les dañó la carne, el pollo, el queso y otros alimentos que necesitan una cadena de frío para su conservación.