Con un pronóstico reservado, por las condiciones en las que llegaron al mundo, se mantienen los trillizos de Caripe en la Terapia de Neonatología del hospital Manuel Núñez Tovar en Maturín.
La información fue aportada por Marisela Martínez, médico tratante que este viernes asumió la guardia de la unidad neonatal y por ende el caso de los tres pequeñitos, que alcanzan un kilogramo de peso y que nacieron con 30 semanas de gestación, en el Jardín de Oriente.
«Dios meterá su mano» exclamó la médica al referir que la situación de carencia que se enfrenta en el centro de salud, centinela de Monagas, incide en las condiciones de fisicas que mantienen los pequeños, que se encuentran en incubadiras y recibiendo oxígeno.
En estos momentos se requiere con urgencia el antibiótico vancomicina, para iniciar el tratamiento y alentarlos ante cualquier complicación. Así mismo, jeringas y otros insumos como pañales, toallitas húmedas y soluciones fisiológicas, vitaminas y ácido fólico.
«Sus padres y familiares son de muy bajos recursos y no tienen como obtener los medicamentos, sin embargo, esta mañana salieron con recipe en mano, para buscarlos«, dijo la neonatóloga, destacando además que la madre de los pequeños se mantiene también en cuidados y que solo han mantenido contacto con una tía.
De igual manera, la especialista hizo referencia a la necesidad de exámenes de laboratorio que urgen practicársele a los pequeños y que tampoco han podido por falta de recursos, ya que no hay como realizarlos en el Hospital Central de Maturín.
Esperando que pueda solventarse la necesidad a la brevedad posible para seguir ayudando y atendiendo a lo pequeños, la doctora también destacó que de los tres, una de las bebas, al parecer no reúne el kilogramo de peso y esto tiene a preocupar a los galenos.
Comentó a si mismo que los trillizos de Caripe, comparten sala neonatal con 8 prematuros más que también requieren ayuda y asistencia urgente.
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