Al menos tres aires acondicionados fueron hurtados de la Unidad Educativa de Fe y Alegría Padre Luis Antonio Ormieres de La Muralla. Desde hace tres semanas los delincuentes estaban tratando de ingresar por el portón principal que fue violentado recientemente.
Los equipos vandalizados pertenecían al área de preescolar y del laboratorio clínico que es usado por los estudiantes para sus prácticas de pasantías. A pesar de los llamados a los cuerpos de seguridad, los profesores afirman que sólo hacen patrullaje en semanas flexibles y en horas del día.
“Los robos ocurrieron durante la semana radical los días miércoles y jueves, primero de llevaron el aire del laboratorio clínico pedagógico y al siguiente día se robaron dos aires del preescolar. Los compresores fueron desmantelados por completo para vender las piezas, han dañado las cercas y la puerta de uno de los módulos”, narró el profesor Cleiver Peña, coordinador de inserción laboral y educación para el trabajo de la institución educativa.
Peña contó que desde hace tres semanas estaban intentando ingresar por el portón principal violentando la cerca, hasta que recientemente lograron su cometido. Las piezas de metal de uno de los módulos fueron sustraídas para presuntamente ser vendidas como chatarra, agregó.
“Ante esta situación, un grupo de profesores nos hemos turnado para hacer guardia en las semanas radicales para que vean que la escuela no está sola. Sin embargo, para la delincuencia no hay horario para cometer sus fechorías”, afirmó el docente.
En este sentido explicó que el laboratorio clínico no puede funcionar sin aire acondicionado por ser espacios pequeños y estar varias personas en el área genera calor. Señaló que estas áreas deben estar climatizadas para poder manejar las muestras, por lo que se corre el riesgo de dañar las muestras y dificulta que los estudiantes puedan hacer sus pasantías.
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