Con una inversión aproximada de 25 millones de bolívares, solo en jamón y queso amarillo, hace tiempo que la charcutería se volvió inaccesible para el monaguense.
En los locales del Centro Comercial “Bello Campo”, en la avenida principal de Tipuro, el precio del jamón de espalda está entre 10 y 14 millones de bolívares; el queso amarillo va de los 12 a los 16 millones; la tocineta ronda los 21 millones mientras que el salchichón y queso parmesano está por el orden de los 32 millones de bolívares.
De esta forma, un maturinés promedio necesita invertir más de 100 millones de bolívares para comprar un kilo de cada producto; es decir, alrededor de 67 dólares según la cotización del BCV.
En lugar de invertir sumas tan exorbitantes, a medida que el país se adentra en una profunda crisis económica, los ciudadanos han optado por sustituir la charcutería por embutidos como queso duro, huevos y mortadela para gastar menos de 20 millones de bolívares.
En el Mercado Viejo de Maturín, el cartón de huevos se consigue entre 3 y 4 millones; mientras que un kilo de mortadela, de acuerdo a la marca, va de los 3 a los 6 millones y el queso duro está por el orden de los 4 millones de bolívares.