El personal que labora en el servicio de fisiatría del Hospital Central de Maturín, esperan que las autoridades pertinentes atiendan prontamente el problema de las filtraciones que obligó a suspender parcialmente el servicio debido al fuerte olor a humedad.
Gran cantidad de agua se puede observar en los pasillos de este servicio debido a que las filtraciones se han agudizado con las intensas lluvias de los últimos días. Anteriormente atendías hasta 70 pacientes diarios entre las consultas y las terapias.
El coordinador del referido servicio, José Galea, indicó que el director del centro de salud y el coordinador regional de salud, han hecho inspección del área, pero no ha habido respuesta oportuna. La semana pasada, un grupo de ingenieros inspeccionaron el lugar y dijeron que “pronto” comenzarían las reparaciones.
“La única respuesta que nos han dado es que no hay recursos, que el servicio está en lista para atenderlo pero que hay otras prioridades y que no será ahorita la rehabilitación, eso es lo que nos han dicho. Los techos están a punto de caerse de tantas filtraciones, de 10 aires acondicionados, solo dos están en funcionamiento”, manifestó Galea.
Actualmente el personal solo acude a cumplir horario, por lo que solo atienden a un grupo de entre 25 y 30 niños los días jueves y entre 5 y 10 pacientes para los carnets de pacientes con discapacidad.