El general Rafael Medina, comandante del Cuerpo de Bomberos del estado Monagas, aclaró este lunes 25 de abril que el accidente con gas cloro en la parroquia Santa Cruz de Maturín dejó un saldo total de 14 personas afectadas y sin fallecidos.
Indicó del mismo modo que, «por fortuna no se registró ningún deceso y que los dos casos más graves fueron llevados al Hospital Manuel Núñez Tovar y antes de finalizar la tarde les habían dado de alta».
Sobre las investigaciones del caso, el jefe de los Bomberos detalló que ocurrió en la calle La Orquídea del sector Flor Marina de La Cruz. La llamada de emergencia la realizaron vecinos de la zona al VEN-911, a las 10:13 am, saliendo de inmediato comisiones contra incendio.
Resulta ser que, en una casa que fungía como recuperadora de material estratégico (material metálico) conocida como «chatarra», se encontraba un cilindro de gas cloro de 150 libras, el cual había sido vendido al dueño del inmueble. El negocio (chatarrera) no tenía ningún registro de comercio.
«El cilindro fue manipulado inapropiadamente por el dueño de la vivienda donde almacenan material metálico. El dueño de la casa comenzó a trabajarlo para quitarle la válvula con una segueta y este aún contenía en su interior residuos de gas cloro y ellos inhalaron el gas».
«Gracias a Dios la bombona no tenía gran cantidad del químico para el momento. El caso fue referido al inspector de guarida que hizo concomimiento a la Fiscalía 14 que se encarga de delitos ambientales, abriéndose una investigación«, dijo.
Medina añadió que durante las labores de campo en la dirección antes mencionada fueron desalojadas unas 55 personas para evitar que también resultaran afectadas por la exposición del gas cloro.
Indicó que, luego de ser controlada la situación, el cilindro fue llevado a la planta de tratamiento de aguas servidas en El Faro como medida de seguridad para diluir el poco gas que quedaba y perdiera el efecto, quedando neutralizado.
El general Medina detalló han atendido, con este caso, tres accidentes en chatarreras.
Explicó que «son cilindros obsoletos y que algunas personas por necesidad venden a las chatarreras; como son envases pesados por la misma estructura y el grosor del hierro, sacan de compromiso al alguna familias».
Advirtió que los chatarreros no se están percatando del riesgo que corren, exponiendo sus vidas a la muerte.
Finalmente hizo un llamado a no hacerlo este tipo de comprar y que desistan de esta oferta peligrosa. En este sentido, puso a disposición el 0414.091-38-56 para notificar la venta de estos cilindros y llevarlos a sitios acordes para su neutralización.