Las autoridades de Silicia declararon este domingo 7 de marzo el estado de crisis regional luego que una nueva erupción del volcán Etna cubriera de cenizas negras y piedras a la isla.
Posteriormente, solicitaron ayuda al gobierno del presidente Sergio Mattarella, ante la emergencia ambiental, según reseñó DW Noticias.
“La actividad eruptiva del Etna se reanudó esta mañana desde el cráter hacia el sureste a una altitud de 2.800 metros: copiosa caída de ceniza en los municipios de Zafferana a Guardia y Giarre, con molestias al tráfico. No hay solicitud de ayuda para los bomberos de Catania”, informaron en Twitter el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) y los bomberos de Catania.
Este sería el séptimo temblor volcánico que registra en Silicia desde el pasado 16 de febrero. Según medios locales, ese día fue cerrado el aeropuerto de Catania debido a los problemas de visibilidad derivados de la nueva erupción del Etna, que se encuentra a pocos kilómetros de distancia.
Dicha erupción duró tuvo horas y al día tanto Catania como los municipios aledaños amanecieron cubiertos de ceniza y fragmentos de lava.
Luego de ello, ocurrieron las posteriores erupciones siendo más leves. Los mismos llegaron a cubrir con un ligero manto negro de ceniza en el aire a Silicia, que se fue depositando en los tejados de las casas hasta el miércoles en la ciudad de Palermo, según medios italianos.