Cerca de las 9:30 de la noche del domingo 27 de agosto murió una mujer de nacionalidad venezolana identificada como Abigail Ojeda González, de 33 años, quien recibió una bala perdida de una riña en el barrio El Pueblo, en la localidad Suroccidente de Barranquilla.
La mujer se dirigía a su casa acompañada por su esposo Andrés Ruiz y sus tres hijos, de 10, 8 y 7 años, luego de salir de un partido de fútbol y comprar comida en una tienda del sector.
Según relató Ruiz al portal Ojo de la calle noticias, cuando ellos iban cruzando por la calle había dos hombres discutiendo, uno de ellos sacó un revólver, hizo dos tiros al aire y huyó en una moto; de inmediato, el otro implicado salió a perseguirlo y el pistolero volvió a accionar su arma sin mirar a dónde apuntaba, e hirió de gravedad a Ojeda González, quien estaba resguardada detrás de un carro con sus tres hijos.
El homicida escapó en la moto y Ruiz salió en auxilio de su esposa, quien alcanzó a ser trasladada hasta un centro asistencial, donde perdió la vida, porque el proyectil le perforó el abdomen y un órgano.
“(Cuando estaban en la clínica) ella me pregunta por los niños y yo le digo: ‘ellos están bien, mi amor, no te preocupes’, ella se me ríe. Ella me dice: ‘me quiero ir de aquí, me quiero ir del hospital, llévame para mi casa’”, fueron las últimas palabras de Abigail Ojeda González a su esposo.
Las autoridades indicaron que el crimen fue: “homicidio con arma de fuego aleatorio” y que el deceso de la víctima se produjo cerca de las 10:00 p. m., media hora después del hecho.
De acuerdo con El Heraldo, testigos del crimen indicaron que el homicida había sido el hijo de un pastor, quien está prófugo de la justicia. Abigail Ojeda era vendedora en un almacén del sector y llevaba tres años viviendo en El Pueblo con Andrés Ruiz.