Una nueva tragedia enluta a España, este viernes al menos 10 personas murieron y dos resultaron heridas de gravedad en un incendio en una residencia para ancianos y enfermos mentales en la región de Aragón.
La conflagración surgió en la madrugada en un asilo ubicado en la localidad de Villafranca de Ebro, cerca de la capital de la región, Zaragoza.
Torres agregó que el establecimiento, que se fundó en 2008 para albergar a personas mayores pero que también recibe a personas con problemas mentales de cualquier edad, tenía «82 residentes».
Por su parte, la alcaldesa de Villafranca de Ebro, Volga Ramírez Gamiz, dijo que el fuego se concentró en una sola habitación, pero el humo se dispersó rápidamente por toda la residencia.
«Ha sido en una habitación, con la suerte que esa habitación tiene una puerta de seguridad», pero «ha salido el humo», señaló.
En el edificio se alojaba «gente de todo tipo (…) Gente muy joven, porque hay gente hasta de 25 años. O sea, que no estamos hablando de gente solo mayor. Hay gente joven con problemas mentales», dijo la alcaldesa.
El jefe de bomberos del Ayuntamiento de Zaragoza, Eduardo Sánchez, dijo que «había una puerta cortafuegos que ha funcionado, la mitad del edificio ha quedado a salvo del incendio», sin embargo, algunas personas de la pequeña localidad, de 840 habitantes, y el ministro Torres sugirieron que había falta de personal en la residencia.
Es importante «que las residencias tengan otro formato, e indudablemente son cuestiones que también tienen que hacernos pensar y recapacitar a todos. Indudablemente lo que no podemos tener es recortes cuando se habla de las personas mayores, porque (…) tienen dificultad ante cualquier situación para poder moverse», aseveró.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, escribió en X que estaba «consternado ante la tragedia».
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