A medida que el huracán Lee fluctúa en intensidad sobre las aguas abiertas del Atlántico, sus efectos podrían sentirse pronto en las playas de toda la costa este en forma de corrientes de resaca potencialmente mortales y condiciones peligrosas en la costa.
El huracán Lee se volvió a fortalecer hasta convertirse en un huracán de categoría 3, con vientos máximos sostenidos de 193 kilómetros por hora, según imágenes de satélite y datos de un avión Hurricane Hunter, informó el Centro Nacional de Huracanes en una actualización a las 5 p.m. ET. Se pronostica un fortalecimiento adicional y se espera que Lee se convierta en un huracán muy peligroso de categoría 4 a última hora de esta noche o a primera hora de la mañana de este lunes.
Se prevé que Lee siga desplazándose bastante al norte de Puerto Rico, las Islas Vírgenes Británicas y de EE.UU. y el norte de las Islas de Sotavento, pero tendrá repercusiones allí y en otras islas del Caribe. Todavía es demasiado pronto para determinar su trayectoria a largo plazo para finales de esta semana y la importancia de los efectos que podría tener para los estados del noreste de EE.UU., las Bermudas y el Atlántico canadiense.
Sin embargo, se espera que la costa este se enfrente a grandes marejadas y corrientes de resaca de forma creciente a lo largo de esta semana, al igual que el Caribe se está viendo afectado ahora.
«Las marejadas generadas por Lee están afectando partes de las Antillas Menores», advirtió el Centro Nacional de Huracanes (NHC por sus siglas en inglés) de Estados Unidos el viernes por la noche. Las Islas Vírgenes Británicas y Estadounidenses, Puerto Rico, La Española, las Islas Turcas y Caicos, las Bahamas y las Bermudas también enfrentarán oleajes este fin de semana que pueden traer olas y condiciones de rompimiento potencialmente mortales.
La oficina del Servicio Meteorológico Nacional en San Juan, Puerto Rico, dijo que se pronosticaban olas de entre 2 y 3 metros para este domingo. Se esperan olas más grandes la próxima semana a lo largo de las playas orientadas al este y al norte.
«La erosión de las playas y las inundaciones costeras son posibles», publicó la oficina en X, antes conocido como Twitter.
Lee, que era una tormenta de categoría 1 el jueves, se intensificó con una velocidad excepcional hasta alcanzar la categoría 5 a medida que se desplazaba hacia el oeste a través del Atlántico, duplicando con creces la velocidad de sus vientos hasta 265 km/h en solo un día.
La cizalladura vertical del viento y un ciclo de sustitución de la pared ocular -un proceso que ocurre con la mayoría de los grandes huracanes de larga duración- han llevado desde entonces al debilitamiento de Lee, dijo el NHC.
Ahora es una tormenta de categoría 2 con vientos máximos sostenidos de 169 km/h. Los meteorólogos prevén que Lee recupere fuerza «durante los próximos dos días, seguida de un debilitamiento gradual», dijo el NHC a primera hora de este domingo. Lee estaba situado a unos 450 km al noreste del norte de las Islas de Sotavento a las 5 a.m. ET de este domingo y se movía en dirección oeste-noroeste a 14,5 km/h.
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