
La población de Barrancas del Orinoco, no sólo se caracteriza por ser una tierra prehispánica y punto arqueológico del oriente venezolano, en ella se celebran las Ferias del Coporo, con las cuales se realza la pesca esta especie de pez en grandes cantidades en las aguas del río Orinoco.
Propios y visitantes esperan agosto (mes en el cual se llevan estas fiestas populares) para disfrutar de las actividades recreativas, culturales y deportivas, que convierten a la capital del municipio Sotillo en el sur del estado Monagas, como el epicentro del pescado en Venezuela.

La jornada es propicia para el intercambio cultural, a ello se le suma la exposición de artesanía, gastronomía y producción propia de la zona.
Las manifestaciones tradicionales autóctonas son protagonistas de esta faena. Competencia de tejido de sombrero, pelotica de goma, canalete y nado contra la corriente son realizadas por los indígenas waraos quienes con su carisma hacen sentir a los visitantes como en casa.

La competencia de relajación del Coporo en menos tiempo (limpiar y cortar el pescado), es el punco focal de estas ferias que ya tienen 8 años celebrandose y que cada vez cobra mayor arraigo en el poblado sureño.

Expertos en este arte se enfrentan en la competencia donde los aplausos y las barras dan ánimo a su participante favorito.

La importancia que tienen esas ferias para los sotillenses, es que busca posicionar al municipio como la entidad pesquera no sólo de Monagas, sino de todo el oriente y parte del país.
El rio Orinoco es una bendición para quienes habitan Barrancas del Orinoco. Durante los días de ferias la población se convirte en la capital turística del sur de Monagas, lo que le permite recibir visitantes desde los estados Bolívar y Delta Amacuro.
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